Por Eduardo Villalobos
En artículos anteriores explicamos la importancia de defender el sindicato de JAPDEVA, SINTRAJAP, como punta de lanza de la defensa de los derechos sindicales de la clase trabajadora de Costa Rica.
En asamblea convocada por la junta directiva electa por los trabajadores, se acordó mantener esta junta, en contra de la junta directiva impuesta por el gobierno a través del Ministerio de Trabajo. Este hecho es algo inédito en la historia del país. Una intervención directa de la patronal que no puede ser tolerada por los trabajadores.
Estalla la huelga
El acoso y la persecución hacia los trabajadores y la estructura sindical se intensifican en vistas de la convocatoria de huelga. Hay una especie de estado de sitio que no es novedad cuando ha habido una huelga en el puerto de Limón. Tenemos que recordar la contratación de esquiroles colombianos y la militarización de los puertos durante movimientos anteriores.
Pero esta vez la lucha se puede denominar como crucial y definitiva. La privatización de los puertos ha sido un emblema de lucha casi al mismo nivel de la lucha contra la privatización del ICE y los servicios públicos.
Sin embargo, durante la última lucha contra el TLC y la posterior derrota en el referendo de los Arias, el eje contra las privatizaciones sufrió también una derrota importante, ya que la apertura de las telecomunicaciones es un hecho.
El gobierno de los Arias y ahora el de Chinchilla, buscan avanzar en formas abiertas o encubiertas de privatización de los servicios fundamentales. El ejemplo del agua de la comunidad de Sardinal, donde empresarios privados intentan saquear el agua de las comunidades para alimentar los campos de golf y otros proyectos de “desarrollo turístico”. Esto ha sucedido como ejemplo de modelo de desarrollo, sin importar las consecuencias que puedan sufrir las comunidades. Tenemos también el ejemplo de las concesiones del aeropuerto y las carreteras que no han sido más que negocios particulares de miembros de los diferentes gobiernos, es decir de sectores de la burguesía que se enriquecen con el empobrecimiento de la clase trabajadora y el pueblo.
La Asamblea del 4 de marzo le da un impulso a la lucha
Luego de la maniobra del gobierno al nombrar a dedo a unos cuantos testaferros como junta directiva, a pesar del clima antes descrito, una Asamblea de Trabajadores mantiene como dirección legítima de su sindicato la electa en Asamblea de Trabajadores.
Esto demuestra un principio que desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) defendemos de manera férrea, la movilización y la consulta democrática a la base como medio fundamental de lucha.
Así pues la maniobra del gobierno, desde el punto de vista legal ha tenido un revés. Por eso la negativa del Ministerio de Trabajo para inscribir el acta de dicha Asamblea.
Pero insistimos que esto no es suficiente, la movilización a la que llama SINTRAJAP es lo medular. Si el movimiento es fuerte y se sostiene, se podrá dar un golpe a los Arias y a su sucesora.
Pero tenemos que ser claros, este movimiento se puede sostener y amplificar si todo el movimiento sindical en su conjunto sale a dar la pelea. No hay cabida para excusas ni diatribas.
La defensa de los puertos en contra de la privatización y control de transnacionales privadas es estratégica.
Desde el PSOCA llamamos a todas las organizaciones, que así como SINTRAJAP realizó una Asamblea para definir esta huelga, hagan lo mismo. No se debe esperar hasta que el movimiento arranque, es tarea urgente.