¡ABAJO EL “COMBO FISCAL”
¡QUE RENUNCIE CARLOS ALVARADO Y SU GOBIERNO!
La democracia costarricense está en crisis. El “Estado de Bienestar”, impuesto después de la revolución de 1948, ha sido desmantelado paulatinamente por décadas de ajuste neoliberal. El país lejos de avanzar y consolidar sus anteriores y confortables índices del nivel de vida, retrocede de manera alarmante.
El irresoluto problema de la deuda pública y el déficit fiscal
La deuda pública, sea interna y externa, es del 48% del Producto Interno Bruto (PIB) y el déficit fiscal fue del 6,2% en el año 2017. La deuda pública del gobierno central era del 25% del PIB en el año 2008 y se incrementó en 23% más en términos de 9 años. Del conjunto de esa deuda, la mayor parte corresponde a la deuda interna. De este tipo de deuda, el 44% corresponde a acreedores del sector privado y 5% a los bancos privados, es decir que el 49% es deuda del gobierno con el sector privado. El otro 51% de dicha deuda corresponde al sector público no financiero (CCSS, RECOPE y otros), a los bancos públicos, al sector financiero no bancario (INS, pensiones del poder judicial y otros), resto del sector público, financieras, mutuales, cooperativas y otras.
Es importante destacar que la carga tributaria en Costa Rica es baja (13,2% del PIB). Por su parte los impuestos directos constituyen apenas el 35,9 % del total de impuesto y el otro 64% corresponde a impuestos indirectos. Por otro lado, los impuestos sobre la renta y utilidades son bien bajos, apenas constituyen un 4,5% del PIB, mientras que en los países de la OCDE son de casi el 12%. Asimismo, es necesario mencionar que de aprobarse el paquetazo fiscal los porcentajes de los impuestos indirectos, ya sea al consumo y otros, se incrementarán haciendo pagar aún más a los trabajadores, sectores populares y sectores de clases medias, no así a los ricos y superricos.
El aumento de la deuda del 25% al 48% del PIB, en términos de nueve años, ha conllevado al incremento del déficit fiscal porque una gran parte el presupuesto de la República se ha venido financiando mediante dicha deuda. Este incremento de la deuda es el producto de los bajos ingresos fiscales por la gran evasión fiscal, las grandes exoneraciones fiscales, los bajos impuestos sobre la renta y las utilidades y las desgravaciones arancelarias, producto del TLC.
La histórica lucha contra el Combo del ICE
Durante tres semanas, del 16 marzo al 4 de abril del 2000 los trabajadores y las masas populares de Costa Rica desarrollaron las históricas movilizaciones contra el proyecto de ley conocido como el “Combo del ICE, que pretendió privatizar el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE). Estas jornadas fueron casi una insurrección popular. Al final, para contener la dinámica de la lucha, la Sala Constitucional, mediante el fallo No. 00-03220, del 18 de abril del año 2000, declaró inconstitucional el Combo del ICE.
Las luchas de resistencia
En los últimos años, los trabajadores costarricenses han librado numerosas batallas contra el ajuste neoliberal, y contra varios intentos de los gobiernos de turno, para solucionar la crisis fiscal a costa de las conquistas laborales.
En abril del 2016, se produjo una importante huelga de empleados públicos, que tienen como vanguardia al magisterio y al sector salud. En julio del 2017, los trabajadores del poder judicial se fueron a huelga general en defensa de sus pensiones.
El proyecto de Ley No 19.923: fallido intento para solucionar la crisis fiscal
En el año 2016, fue introducido en la Asamblea Legislativa el denominado proyecto de Ley No 19.923, o “ley para racionalizar el gasto público”, una fusión de varios otros proyectos de leyes, que perseguían el mismo objetivo de terminar con el déficit fiscal, a costa de las conquistas salariales y laborales: reducción y eliminación de los componentes salariales para los empleados del sector público (reducción del derecho de cesantía, limitaciones a la dedicación exclusiva, reducciones en el régimen de disponibilidad, aplicación de reglas de responsabilidad fiscal que permitirá despidos masivos contra los empleados públicos, etc.).
El impopular gobierno de Carlos Alvarado: un accidente de la historia
Una de las primeras decisiones en materia económica, fue impulsar el proyecto de Ley No 20.580, “Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas”, expediente, mejor conocido popularmente como “Combo Fiscal”.
El gobierno de Carlos Alvarado tomo posesión en mayo del año 2018 y en cuatro cortos meses, septiembre de 2018, se ha convertido en un gobierno impopular, el cual se ha desprestigiado y perdido el apoyo de los grandes sectores por los cuales ganó las elecciones, perdiendo su base social de sustento. No les ha cumplido cuestiones de derechos a los sectores que lo llevaron al poder, tales son los casos del sector LGBTI, al sector de las mujeres y otros. Por otra parte, hay que destacar que Alvarado logró ganar las elecciones por los votos prestados de los partidarios de otros partidos frente al peligro de que ganara la contienda electoral, el evangélico Fabricio Alvarado.
Entonces, el gobierno de Carlos Alvarado solamente se sustenta en acuerdo con el PUSC y sectores neoliberales, así como con el apoyo de las cámaras empresariales y de los organismos financieros internacionales, los cuales condicionan el financiamiento futuro a la aprobación del plan fiscal. Ningún gobierno, en los últimos 20 años, se había desprestigiado, desgastado y era tan odiado en poco tiempo, como el gobierno de Carlos Alvarado. A pesar de esa situación el gobierno de Carlos Alvarado prefiere su matrimonio con el PUSC, los sectores neoliberales, las cámaras empresariales y los organismos financieros internacionales, rechazando cualquier concesión, por mínima que sea, a los sectores de los trabajadores, populares y de clases medias. De aquí se concluye que la huelga indefinida en curso constituye un pulso decisivo y determinante para el gobierno de Alvarado y, por consecuencia, de las organizaciones sindicales. Este gobierno impopular apuesta a derrotar a los trabajadores organizados en los distintos sindicatos del sector público.
El estallido de la Huelga General Indefinida
Retomando las tradiciones y experiencias de la lucha contra el Combo del ICE, las diferentes centrales sindicales, sindicatos y bloques sindicales, superaron sus diferencias y decidieron establecer la unidad de acción, creando la Unidad Sindical que convocó a una Huelga General Indefinida a partir del día lunes 10 de septiembre.
La huelga general arrancó con fuerza arrolladora en la fecha programada, estremeciendo no solo a Costa Rica, sino al conjunto de Centroamérica. A diferencia de otras huelgas, la presente huelga indefinida cuenta con el apoyo popular del 80% al 95% del conjunto de la población. Esto último, se debe a que ésta, además de luchar contra la reducción, congelamiento y eliminación de los componentes salariales de los empleados públicos, se opone al impuesto a los productos de la canasta básica, a los servicios básicos del agua y la luz, a los medicamentos, a la medicina privada y a muchos otros servicios. Es importante mencionar que el gobierno pretende imponer ese plan fiscal para financiar una pequeña parte del alto déficit fiscal acumulado
Dia con día, la huelga indefinida se ha venido fortaleciendo, cada vez más, con mayor participación de trabajadores, tanto a nivel regionalizado como a nivel nacional. El pico más alto del movimiento huelguístico se alcanzó el miércoles 12 de septiembre, cuando en la marcha nacional se movilizaron unas 500 mil personas de todo el territorio nacional.
La represión policial contra los estudiantes de la Universidad de Costa Rica (UCR), violentó la autonomía universitaria y provocó una ola de indignación general que hizo que el movimiento estudiantil cerrara filas junto a los trabajadores, contra el gobierno.
¿Hacia Dónde Va el Gobierno de Carlos Alvarado?
Aunque en apariencia el gobierno de Carlos Alvarado es “democrático”, sin embargo, dada su profunda debilidad en los sectores de masas, tiende a apoyarse, cada vez más, en los neoliberales y las fuerzas policiales. En corto tiempo, el gobierno de Alvarado ha violado en dos ocasiones la Constitución Política. La primera violación se produjo cuando la ministra de Hacienda, con el aval del presidente de la República, pagó 182.000 millones de colones de la deuda pública, sin la autorización de la Asamblea Legislativa, lo cual prohíbe la Constitución Política. La segunda violación se realizó el día 12 de septiembre en contra de la autonomía universitaria cuando fuerzas policiales invadieron el campus universitario de la UCR, en persecución de estudiantes que protestaban contra el combo fiscal.
El gobierno de Carlos Alvarado con tal de cumplir sus acuerdos económicos neoliberales con el PUSC, de cumplirle a las cámaras empresariales y obedecerles a los organismos financieros internacionales y las calificadoras de riesgos, está dispuesto a hacer cualquier cosa, incluida la violación a la Constitución de la República. Alvarado se ha vuelto, igual que los neoliberales de la Asamblea Legislativa, inmune, sordo y ciego a las presiones sociales de distintos sectores. Igual está haciendo con las grandes movilizaciones que realiza el movimiento sindical en el proceso huelguístico.
Entonces, nos encontramos frente a una nueva situación y escenario social y político con este gobierno de Alvarado, totalmente distinto. Un gobierno presidencialista de carácter bonapartista, dispuesto a golpear y derrotar al movimiento de los trabajadores y sus organizaciones sindicales para debilitarlos y poder continuar con las aplicaciones de sus planes de desmantelamiento del Estado. De aquí que es necesario y urgente que las dirigencias de la alianza denominada “Unidad Sindical” saquen conclusiones y las consecuencias de que la actual huelga indefinida contra el gobierno requiere del impulso y desarrollo de acciones más combativas, una mejor organización y centralización, que puedan frenar y derrotar los planes de este gobierno impopular.
Es urgente fortalecer la Huelga General Indefinida
El gobierno de Carlos Alvarado y los grupos económicos que lo apoyan, esperan cansar a los trabajadores y llevarlos a un callejón cuya única salida seria la aprobación parcial o total del proyecto de Ley No 20.580.
Por ello debemos fortalecer la Huelga General creando comités en las fabricas y en cada centro de trabajo o comunidad, de manera que participe la mayor cantidad de personas, para tener control de la lucha y de las negociaciones.
No se debe levantar la Huelga General bajo el engaño y las promeses del gobierno. Ninguna decisión se debe tomar hasta que las bases decidan democráticamente el camino a seguir.
¡Que renuncie Carlos Alvarado y su gobierno!
Toda Huelga General plantea el problema de quien debe gobernar. En los hechos, los trabajadores y los sectores populares han paralizado el país, demostrando una enorme fuerza transformadora. Sin habérselo propuesto, los trabajadores están demostrando que ellos son quienes deben gobernar en Costa Rica.
El gobierno de Carlos Alvarado ha traicionado el mandato de sus electores, por ello debe renunciar de manera irrevocable junto con todos sus ministros. ¿Quiénes debe asumir el gobierno? Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) planteamos que ante una posible renuncia del gobierno de Carlos Alvarado, el gobierno debe ser asumido por Movimiento Unitario Sindical Costarricense, que son los organismos que dirigen la actual Huelga General.
Ha llegado la hora de que la sociedad costarricense resuelva los grandes problemas que los diferentes gobiernos no han podido hacer. Llamamos a no confiar en los partidos como el PAC, PUSC, PLN, PRN y demás, porque todos pretenden resolver el problema de la crisis fiscal, en detrimento de la clase trabajadora y los sectores populares.
La solución al déficit fiscal, no pasa por arrancar las escuálidas conquistas salariales y laborales a los trabajadores, sino porque las empresas y grupos económicos paguen más impuestos, conforme a sus ganancias.
Es hora de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, en donde la mayoría de la población, de manera democrática, decida como reorganizar las instituciones del Estado y como resolver el cáncer del déficit fiscal, que solo ha servido para engordar los bolsillos de las grandes empresas.
Centroamérica, 14 de septiembre del 2018
Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)
Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)