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¡POR UNA NUEVA REPUBLICA!

MOVIMIENTO NUEVA REPUBLICA

(MNR) LLAMAMIENTO PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UNA NUEVA REPÚBLICA

LA GRAVE E INSOSTENIBLE SITUACION NACIONAL:

A pesar de que Guatemala es un país con grandes recursos naturales y una posición geopolítica envidiable, es el segundo país más desigual de América Latina, debido a una concentración de la riqueza en el 20% de la población que recibe el 64% de los ingresos nacionales.

Por otro lado, el salario mínimo, que gana la gran mayoría de trabajadores formales, es de Q.1,560.00 al mes, es decir Q52.00 diarios, más Q250.00 de bonificación incentivo. Si tomamos en cuenta que la canasta básica de alimentos ronda los Q 2,000.00 y que la canasta básica vital ha superado los Q 3,000.00, debemos concluir que una gran cantidad de guatemaltecos tienen empleos y salarios que apenas les alcanza para llegar a fin de mes, mucho menos para garantizarse una vida digna.

En Guatemala La población económicamente activa se ubica en 41%, aproximadamente el 25% de esta se desempeña en empleos formales, en tanto que el resto lo hace en la informalidad. Bajos salarios, empleos precarios, informalidad desproporcionada, subempleo, carestía de la vida, pérdida del poder adquisitivo de la moneda denotan la gravedad de la crisis. Como consecuencia, la clase media tiene a reducirse mientras que la clase pobre crece.

El sistema educativo guatemalteco se encuentra colapsado, en el área rural, la media indígena estudia 3.2 grados escolares, mientras la no indígena estudia 4.8 grados escolares, en el área urbana la situación mejora pues los indígenas logran un promedio de 5.6 grados escolares, y los no indígenas un promedio de 8.9 grados escolares, esto quiere decir que en el área rural la mayoría no logra completar la educación primaria, mientras que en el área urbana únicamente los no indígenas alcanzan la educación media. Si bien es cierto que la inversión en materia educativa se ha incrementado, los eternos problemas de infraestructura, ausencia de cobertura y especialmente la mala calidad educativa subsisten, aún se conservan tasas de analfabetismo que avergüenzan a nuestro país.

En materia de salud, los índices de mortalidad son de 78,000 muertes anuales, la mortalidad infantil se encuentra en 22.6 por cada 1000 niños nacidos y la materna se sitúa en una tasa de 133 por cada 100,000 nacimientos. Estas alarmantes cifras se originan en la inexistencia de programas de prevención, falta de cobertura del sistema de salud, precariedad en equipamiento e insumos, debido en la mayoría de los casos a la corrupción del sistema.

En el tema de la vivienda, tan solo se ha cubierto el 29% de la demanda de viviendas, por otro lado una tercera parte del total de viviendas se encuentra sin agua, electricidad y drenajes, lo cual implica que se trata de viviendas que no tienen la categoría de vivienda digna. Los programas gubernamentales para acceder a la vivienda no sólo no satisfacen la demanda sino que han condenado a muchas personas a vivir en condiciones indignas, por otro lado la vía del mercado es inaccesible para la mayoría de guatemaltecos y se ha constituido en un negocio descaradamente favorable al sector financiero nacional.

En materia de seguridad la crisis es evidente, solamente durante el año 2008 fueron asesinadas más de 6,000 personas, el 85% de ellas por arma de fuego. Durante los cuatro años del gobierno de la GANA, fueron asesinadas 21,511 personas, la cifra más alta de los últimos veinticinco años, para el año 2009 todo indica que la situación empeorará y que las cifras de muertes violentas durante este período de gobierno se incrementarán aún más. Además de los altos índices delincuenciales, un problema más grave lo constituye la impunidad, pues sólo dos de cada 100 homicidios son castigados. La garantía de la impunidad es la mayor motivación para los delincuentes.

Esta situación tiene causas profundas en las instituciones de seguridad y justicia, tales como: la infiltración del crimen organizado en la Policía Nacional Civil, Ministerio Público y Organismo Judicial, la corrupción en los tribunales de justicia, la proliferación de armas de fuego entre la población, y principalmente la politización de la justicia, donde cada cinco años los partidos políticos y las élites económicas confabulan y se reparten las magistraturas de la Corte Suprema de Justicia y las Salas de Apelaciones a cambio de impunidad en los delitos que cometen.

Aunado a esta problemática, la carga tributaria sigue siendo soportada por las grandes mayorías vía impuestos indirectos, sin que a la fecha exista gobierno que se atreva a impulsar e implementar una reforma tributaria progresiva, justa y equitativa reclamada históricamente por los sectores progresistas y reivindicada en los Acuerdos de Paz. Es un insulto que en el último presupuesto aprobado el 72% de los ingresos tributarios del país dependa de la tributación indirecta y que solamente el 28% corresponda a impuestos directos. La evasión y elusión fiscal siguen siendo prácticas comunes de las élites económicas, las cuales quedan impunes por un sistema legal y judicial que les favorece, pues el 92% de las evasiones fiscales quedan sin castigo.

El sistema de exenciones vigente, establecido con la finalidad de promover el empleo y la inversión, se ha pervertido y tergiversado maliciosamente, garantizando prebendas a favor de empresarios nacionales e internacionales, tal como sucedió en el año 2006 en que la empresa minera Montana no pagó impuesto sobre la renta al haberse acogido en forma inmoral a la Ley de Maquilas. En el tema de la conservación, manejo, exploración y explotación de nuestros recursos naturales, especialmente en el tema minero, petrolero e hídrico, se sigue evidenciando –incluso por parte del gobierno actual- una política antinacionalista, irresponsable y entreguista en tanto se sigue fomentando el modelo de explotación de estos recursos favoreciendo a las empresas transnacionales y a las oligarquías criollas, en contra de los intereses nacionales, de las poblaciones y de los derechos de los pueblos indígenas.

El Desarrollo Rural Integral aunque forma parte de los discursos oficiales no termina de convertirse en un instrumento alternativo de desarrollo para el país, y se encuentra muy lejos de poder cristalizarse.

Como corolario a lo anterior el sistema político actual sigue a la deriva y no se consolida, el grado de abstencionismo en las pasadas elecciones fue de 51.80%. Esto demuestra que las personas no creen en las instituciones políticas, y que estas no son capaces de dar respuesta a la crisis generalizada que se ilustra en este análisis.

La realidad nos indica que las instituciones parecen haber tocado fondo, los Acuerdos de Paz se encuentran olvidados intencionalmente, los derechos de los pueblos indígenas y el reconocimiento a su identidad ocupan un lugar lejano en la agenda nacional, el estado de derecho es una farsa.

Estamos frente a un gobierno a la deriva, que intenta compensar la grave deuda que los sectores poderosos del país tienen con la población más pobre a través de los programas de cohesión social, pero que deja intacto el modelo político, económico social monopólico y excluyente, y el modelo de corrupción publica y privada. En consecuencia, todo parece indicar que ni por asomo se enfrentaran los grandes problemas estructurales del país sea por que no se quiere o por que no se puede dada la fragilidad y poca solvencia moral, política e ideológica de muchos de los que nos gobiernan.

En cuanto al Organismo Legislativo no cabe duda de que este organismo de estado se encuentra perdido en sus viejas prácticas y ataduras, como fiel representación de la clase política actual que no deja lugar a ilusiones y provoca preocupación y desencanto. Por su parte el Organismo Judicial sigue sin rumbo y victima de las ambiciones personales de quienes lo dirigen, de los negocios y de la politiquería, por lo que no cabe duda sigue marcándole el paso a la justicia el poder del dinero y las influencias de los sectores de poder tradicionales, en contraposición al Estado de Derecho y fundamentalmente en contraposición a los intereses de la mayoría de la población.

Esta ingrata y nefasta realidad, que nos tiene sin rumbo y sin dirección nos lleva al análisis de la génesis y esencia de nuestra República, en tanto advertimos la necesidad de cambios estructurales y de fondo.

La República de Guatemala, desde su fundación ha servido para beneficiar a las elites en perjuicio de las grandes mayorías, para nadie es un secreto que el origen de nuestra República fue pactado entre los privilegiados de siempre dejando fuera de dicho pacto social a los ladinos y mestizos pobres y especialmente dejando de lado al pueblo indígena, estos actores a pesar de ser mayoría han sido dejados fuera de la agenda nacional. Como consecuencia de ello, el sistema político y las instituciones públicas responden al mantenimiento de un sistema económico que propicia la desigualdad, la exclusión, la corrupción y los niveles de violencia y crimen inaceptables. Esta realidad sigue vigente hasta nuestros días, la pobreza y la miseria, la ausencia de Estado, la crisis institucional, la violencia, el crimen, la impunidad y la corrupción son el sello de la República actual la cual nos deja sin futuro.

LA CRISIS ES INNEGABLE, A NIVEL NACIONAL, REGIONAL Y MUNDIAL, LA PROBLEMÁTICA IRRESUELTA, EL PANORAMA DESALENTADOR, LA RECURRENCIA DE LOS ERRORES EN LA CONDUCCION DEL ESTADO ES EVIDENTE, LA AUSENCIA DE PARTIDOS POLÍTICOS QUE REPRESENTEN LOS INTERESES NACIONALES SALTA A LA VISTA, LA AUSENCIA DE IDENTIDAD NACIONAL Y LA CRISIS DEL MODELO ECONÓMICO NOS HACE PROCLAMAR EL AGOTAMIENTO DE LA REPÚBLICA ACTUAL A LA VEZ QUE FUNDAMENTA NUESTRA PROPUESTA.

NUESTRO PLANTEAMIENTO: UNA NUEVA REPÚBLICA SOCIAL, DEMOCRATICA Y PLURICULTURAL.

Quienes integramos este movimiento frente a la grave situación actual no creemos en las revisiones y por el contrario creemos que es el momento de las GRANDES TRANSFORMACIOMES. Creemos que es necesario crear una NUEVA REPUBLICA, establecer nuevas relaciones de poder, poner las instituciones al servicio del ciudadano, refundar el sistema de partidos políticos, transformar el sistema económico, político y social, cambiar profundamente la institucionalidad para sentar las bases de un mejor futuro.

Una NUEVA REPUBLICA SOCIAL, DEMOCRATICA Y PLURICULTURAL que responda a la realidad política, social, económica, y cultural de Guatemala, basada en un ESTADO SOCIAL, DEMOCRATICO Y PLURICULTURAL DE DERECHO es la alternativa que proponemos frente a la pobreza, la exclusión, el desempleo, la falta de oportunidades, la violencia y el crimen.

La coyuntura debe servir para que de una vez por todas se propicien las transformaciones estructurales que gobierno a gobierno –incluido el actual- se postergan maliciosamente, en desmedro del desarrollo y de una vida digna para los guatemaltecos más pobres y que menos tienen. Nos oponemos a que esta crisis se convierta en un vía crucis para los pobres y que el resultado de la crisis solo acentúe más el poder de los de siempre.

Una NUEVA REPUBLICA debe ser reivindicada ¡AHORA! pues este es el momento de insertarnos sin demagogia y sin ambivalencias en la corriente latinoamericana progresista y popular.

La NUEVA REPUBLICA que proponemos debe romper esquemas, terminar con los privilegios, con los monopolios nacionales e internacionales, con los grandes negocios que emanan a la sombra del Estado, con la politiquería, con el caos de la justicia y con la grave e inaceptable inseguridad en que vivimos.

NOS OPONEMOS A:

a. El modelo económico, social y político vigente que se fundamenta en los monopolios, privilegios y prebendas.

b. La clase política actual que solo ha satisfecho sus ambiciones personales y su enriquecimiento desmedido a la sombra del ejercicio del poder.

c. El modelo de conformación y funcionamiento de las instituciones que conforman el Estado ante su falta de funcionalidad, colapso e incumplimiento de sus fines.

d. El funcionamiento de la administración pública que se encuentra inserto en una maraña de corrupción pública y privada, negocios turbios que favorecen a financistas electorales, y ante la carencia de un verdadero sistema de servicio civil que sea funcional, ético y digno. Para quienes integramos este movimiento el daño que le ha infringido la corrupción al país es tan grave como el sistema de monopolios y privilegios.

e. La configuración del papel del ciudadano dentro del actual sistema de partidos políticos, que ha arrastrado al ciudadano al clientelismo en desmedro de la esencia del poder popular.

PROPONEMOS:

- Instaurar un Gobierno para los pobres y para la clase media, que respete y promueva las iniciativas individuales éticas, solidarias y nacionalistas, propiciando el desarrollo justo y equitativo de la nación.

- Defender y consolidar la función del Estado como regulador de la vida económica, frente al colapso y las graves secuelas que han implicado para nuestros países las recetas neoliberales, haciendo eco de la crisis mundial del modelo hegemónico y reafirmando la convicción de construir modelos alternativos. Tanto mercado como sea éticamente posible y tanto Estado como sea necesario, es una de nuestras premisas.

- Construir y consolidar un autentico Estado Social, Democrático y Pluricultural de Derecho que garantice la justicia, la seguridad, el bienestar de la población y la identidad nacional.

- Defender en forma digna nuestros recursos naturales y propiciar una exploración y explotación racional de los mismos, sin entreguismos y pensando en el beneficio de los guatemaltecos.

- Romper con los vicios tradicionales de los partidos políticos, tales como el caudillismo, el verticalismo, el clientelismo, la corrupción, la indefinición ideológica, la compra de voluntades y forjar un reemplazo generacional de la clase política actual.

- Salirle al paso a las propuestas politiqueras y populistas que ya gobernaron el país agotadas por corruptas e incapaces, y a los proyectos de derecha que no garantizan el futuro.

- Construir una propuesta política comprometida con la transformación social que el país necesita, respetuosa de la diversidad y de los derechos humanos, en donde el poder esté democratizado en todos los ámbitos de la vida social.

- Construir una alternativa política capaz de hacerle eco en forma real a la nueva corriente Latinoamericana de izquierda, que hoy más que nunca reclama que en Guatemala exista una verdadera alternativa seria, ética, creíble, fundamentada teórica y políticamente y no demagógica y oportunista.

- Construir un partido político de Izquierda Democrática y Progresista, que tenga la ideología como baluarte y que sirva como instrumento para impulsar los fundamentos de UNA NUEVA REPUBLICA.

- Propiciar la participación política en igualdad de oportunidades para todas y todos los ciudadanos comprometidos con la democracia, la justicia social y la transparencia sin importar estatus social, origen étnico o religioso.

- Mediante el voto popular y la toma de conciencia ciudadana acabar con la actual clase política carente de valores, principios e ideología.

- Que este país se levante, que nazca una conciencia ciudadana capaz de revertir el estado de cosas y que el pueblo comprenda que el poder le pertenece.

QUIENES SOMOS, QUE NOS HACE DIFERENTES Y EL MOVIMIENTO POLITICO SOCIAL COMO PARTE FUNDAMENTAL DE NUESTRAS METAS.

Somos un grupo de guatemaltecos y guatemaltecas, trabajadores de diversas ramas, campesinos, obreros, dirigentes sociales, sindicalistas, dirigentes campesinos, empresarios pequeños y medianos, profesionales y técnicos especialistas en diversas ramas, luchadores sociales y populares, reivindicadores por excelencia. Nos identificamos con las transformaciones profundas, la democracia, el Estado de derecho, la justicia social, la transparencia y la honestidad. Contamos con experiencia de participación política de diversa índole, estudiantil, social, académica, profesional, popular y social en diversos sectores y niveles de carácter democrático, y hemos acumulado experiencia profesional y política para el abordaje de los grandes problemas del país desde una perspectiva ética comprobada. Somos personas con ideología e ideales profundos irrebatibles e irrefutables.

Somos diferentes porque promulgamos transformaciones económicas, sociales y políticas profundas, y porque estamos firmemente comprometidos con la honestidad y la transparencia, así como con el bienestar de todos los ciudadanos. Somos diferentes porque cuestionamos a la clase política actual del país, no somos parte de ella ni aceptamos someternos al juego de sus intereses y estamos en contra de que la política únicamente sirva para satisfacer ambiciones personales y propiciar el enriquecimiento desmedido e ilícito a la sombra del ejercicio del poder. Somos diferentes por nuestros orígenes, por nuestra trayectoria y fundamentalmente por nuestra práctica y acción política. Pretendemos hacer del MOVIMIENTO NUEVA REPUBLICA un movimiento POLITICO y SOCIAL incluyente y democrático que no le sirva a los intereses de los sectores que ostentan el poder fáctico en nuestro país. Entendemos en forma clara que un partido político es nada más un instrumento a utilizar en el sistema de partidos políticos y que solo el movimiento ciudadano, social y popular puede propiciar las grandes transformaciones.

En virtud de lo anterior llamamos a organizaciones sociales de todo tipo, asociaciones de vecinos, sindicatos, organizaciones campesinas, gremios, comités, grupos religiosos diversos, organizaciones de pequeños y medianos empresarios, organizaciones cooperativistas, ambientalistas, académicos y a todos los ciudadanos y ciudadanas en particular a construir y consolidar juntos este movimiento para que se constituya en el proyecto aglutinante de los intereses de las grandes mayorías, de la justicia y de la paz social que nos conduzcan indefectiblemente a la construcción de la NUEVA REPUBLICA, SOCIAL, DEMOCRATICA Y PLURICULTURAL con que soñamos.

Guatemala, 29 de marzo de 2009.

¡POR UNA NUEVA REPUBLICA! MOVIMIENTO NUEVA REPUBLICA MNR

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