Normal 0 21 false false false ES X-NONE X-NONE MicrosoftInternetExplorer4
Por Manuel Rivera.
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. Las últimas reformas a la Constitución mencionan que la Corte Suprema estará integrada por quince (15) magistrados nombrados por el término de siete (7) años, a partir de la fecha en que presenten la promesa de ley. La Corte Suprema de Justicia es uno de los tres poderes en que está conformado el Estado burgués. Este poder es el más manipulado por la clase social que domina el Estado: la burguesía, que utiliza las facultades instauradas por el mismo sistema para llevar a cabo sus propósitos, y a la vez no afectar a sus representantes. Un ejemplo claro de la dominación burguesa es que el ex presidente Leonardo Callejas tenia acusaciones sobre “abuso de autoridad, violación a los deberes de los funcionarios y malversación de caudales públicos, fondo petrolero, falsificación de documentos, el Caso de Ciudad Mateo, Comunitas I y II”, (La Prensa 2 de Octubre 2006), pero en todos estos casos le dictaron sobreseimiento definitivo. Esta es la “verdadera justicia”, y esto solo uno de un montón de casos.
Proceso de selección de magistrados
Se constituyó una Junta Nominadora, amparada en el artículo 311 de la Constitución. Este establece que dicha Junta estará integrada de la siguiente manera: Un representante de la Corte Suprema de Justicia; un representante del Colegio de Abogados de Honduras; el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos; un representante del Consejo Hondureño de la empresa Privada (COHEP); un representante de los claustros de profesores de la escuela de Ciencias Jurídicas, cuya propuesta se efectuará a través la UNAH; un representante electo por las organizaciones de la Sociedad Civil; y, un representante de las Confederaciones de Trabajadores.
El procedimiento para la elección de los nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia, aparentemente es democrático pero en el fondo es un procedimiento politizado que obedece a intereses creados de sectores dominantes. La magistrada de la Corte de Apelaciones Seccional, Thirza Flores Lanza, en su condición de miembro del Tribunal de Honor, confirma nuestro análisis al mencionar “que existe una pugna entre grupos políticos y económicos poderosos que cada uno está buscando la forma más fácil para tener en la CSJ personas que les sean fiel, que no sirva a los intereses del pueblo, sino a particulares”. Las audiencias públicas son superficiales, calificándolas como “una forma de aparentar transparencia y participación ciudadana que no ha existido”. (La Tribuna 8/1/09).
Valiente denuncia
El abogado Fredin de Jesús Fúnez en su intervención ante la Junta Nominadora criticó la manipulación de los partidos políticos sobre el sistema judicial, al declarar: “el Congreso Nacional escogerá a los quince magistrados de la Corte Suprema en base a criterios políticos, la manipulación de los dos partidos tradicionales en el sistema judicial, una reforma constitucional que garantice la elección de una Corte Suprema de Justicia integrada por todos los sectores del pueblo y se garantice el acceso de la justicia a los pobres”. (La Prensa 7/1/09)
Las audiencias públicas que sirvieron de base para la selección de los 45 abogados seleccionados por la Junta Nominadora, permitirán al Congreso Nacional escoger a los 15 nuevos magistrados de la CSJ. Entre los diputados han surgido una serie de posiciones: “si se reeligen los que están (…) la reelección de algunos de los actuales magistrados (…) ampliar la lista de los 45 seleccionados” y de “respetar los 45 que fueron seleccionados”. Este proceso de selección de los nuevos magistrados fue un verdadero teatro montado por la burguesía y los grandes medios de comunicación que sirvió de cortina de humo para ocultar el control del sistema bipartidista sobre los jueces y magistrados. La verdadera selección es una negociación de las que ocurren en el Congreso, es decir, “bajo la mesa”, sobre cuántos cachurecos y liberales van a conformar la nueva Corte Suprema de Justicia.
Que el pueblo los elija directamente
No creemos en el proceso de selección que ha hecho la Junta Nominadora. Sus miembros son simples títeres del sistema antidemocrático. Ante la presión popular, la burguesía hizo cambios cosméticos que no cambian la esencia antidemocrática, ya que quien tiene la última palabra es el Congreso Nacional, conformado en su mayoría por diputados del sistema bipartidista (Partidos Liberal y Nacional). Por eso no creemos que haya una Corte Suprema de Justicia independiente.
La elección de los nuevos magistrados el pasado 25 de Enero demostró que los partidos se repartieron otra vez los cargos con la cuchara grande. Por ello, el Movimiento al Socialismo (MAS) de Honduras, propone que lo mas democrático en los marcos de la actual sociedad burguesa es que la escogencia de los magistrados y los jueces debe realizarse mediante una elección directa del pueblo. Todos los cargos judiciales deben ser electos por el pueblo, por medio de elecciones democráticas, y también pueden y deben ser destituidos en cualquier momento de la misma manera. Las organizaciones obreras, campesinas y populares deben presentar sus propuestas, pero los mas importante es cambiar el procedimiento de elección y destitución, solo así podremos luchar efectivamente contra la corrupción y cavar el control bipartidsta sobre el sistema judicial.