Mantas de solidaridad, en apoyo a la recien finalizada huelga de hambre de los Fiscales
¿Que se esconde tras la huelga
de los fiscales?
Por Aquiles Izaguirre.
El pasado 7 de abril, cuatro fiscales del ministerio público, iniciaron una huelga de hambre, que en su momento, parecía intrascendente ante el Paro Cívico Nacional programado por la Coordinadora Nacional de Resistencia Popular (CNRP). Estos fiscales, exigían que fuesen auditadas las actuaciones del Fiscal General Leónidas Rosa, quien junto a Omar Cerna, eran acusados por actos de corrupción en los que se beneficiaron a empresarios, políticos, alcaldes, periodistas, etc.
Al inicio la huelga de hambre parecía destinada al olvido, pero, la propia dinámica que llevan las luchas del movimiento obrero y popular hondureño, como el Paro Cívico Nacional, las movilizaciones del primero de Mayo, etc, proporcionaron un gran impulso a la lucha que llevaban a cabo los fiscales de la República.
El carácter de clase del MP.
Es válido mencionar, que la lucha de los cuatro fiscales es justa, pero debemos dejar claro, que su batalla tiene una deficiencia genética, como se evidencio el día que aceptaron la intervención del congreso en su protesta. Y es que; el ministerio público, es un órgano de represión del Estado burgués, por ende esta construido para hacer precisamente lo que hacen los fiscales denunciados, defender los intereses de los burgueses, juzgando y procesando solo a la población pobre que no tiene acceso a la justicia. Al mismo tiempo, son los mismos órganos del Estado burgués los que nombran a los fiscales corruptos, y son estos mismos los que ahora pretenden investigar y enjuiciar a los corruptos. Para que se acabe la corrupción en el Estado, es necesario comprender, que las luchas justas deben encausarse en por las vías correctas, sin confiar en los órganos corruptos del Estado burgués.
Asimismo, la corrupción que se le achaca al Ministerio Público (MP), no es exclusiva de esta Institución; este es el panorama de todas las instituciones del Estado, sin excepciones, donde impera la corrupción, en todos los niveles, creando un modus viven di, en los burócratas, ya que esa es la forma en que la burguesía ha logrado sobrevivir. Especialmente la burguesía hondureña, que desde sus inicios ha sido parasitaria como reflejo de su debilidad intrínseca como burguesía en Centroamérica. Recordemos, que nuestra burguesía ha sobrevivido de las migajas que las transnacionales bananeras les otorgaban, para que ellos facilitaran la transmisión de todos los recursos naturales, la explotación y represión de toda una población.
El conflicto ínter burgués.
Como dice el refrán “Entre bueyes no hay cornadas”, y precisamente eso es lo que acontece en nuestro sistema judicial, en donde desde las alturas de la Corte Suprema de Justicia se dirimen las actuaciones de los subordinados de este poder, dirigido por 9 magistrados. Claro está, que nuestro sistema jurídico está construido para que estos magistrados llegan a sus puestos a través de negociaciones previas, en donde se reparten: el número de instituciones, el número de Diputados y el número de magistrados que le toca manipular a cada empresario hondureño.
De ahí, que los principales actores políticos, intenten aprovecharse de la masividad que tuvo la protesta de los fiscales. Claro está, en la lucha por la sucesión en el partido liberal, entre Roberto Micheletti y Patricia Rodas. Así que cuando algún poderoso, llámese (Callejas, Rosental, Facusse, Nasser, por mencionar algunos) o un socio o amigo de estos necesita un “favor” o es acusado ante la Ley, no se le aplica la justicia porque precisamente para estos casos se han adquirido las “Cuotas de Poder”.
Este grupo de fiscales pertenecientes al ministerio publico estaba compuesto por: Jari Dixon Herrera, Soraya Morales, Víctor Fernández y Luis Santos, ellos decidieron decretar una huelga de hambre exigiendo el esclarecimiento de los casos de corrupción, independencia en sus decisiones, alto a la persecución y estabilidad laboral y la destitución del Fiscal General Leónidas Rosa Bautista y de su Adjunto Omar Cerna.
Junto a ellos, estamos a favor de la lucha contra la corrupción, y que se esclarezcan todos los casos de podredura que involucran a los funcionarios del actual gobierno y de los que han estado recientemente vinculados a el, pero no estamos de acuerdo con el fortalecimiento de las instituciones represoras del estado burgués, en su comunicado, la Asociación de Fiscales de Honduras expone lo siguiente: “la lucha que están, librando va orientada al fortalecimiento institucional del Ministerio Público, procurando con sus acciones que tanto sus autoridades como los y las fiscales cumplan con su ley interna y con el ejercicio de la acción penal pública sin exclusiones ni privilegios para nadie, de forma tal, que igual se pueda acusar por delitos bagatela que por delitos de cuello blanco, sin importar la condición económica o política de las y los imputados(as)”.(Comunicado de fiscales) El Ministerio Publico es una institución creada por el Estado burgués para que proteja sus propios intereses en materia penal, y por ello los revolucionarios no podemos centrar esperanzas en que el ministerio publico actué de manera imparcial como ente represor del Estado.
Una muestra de ello es el caso del Asesinato del Dirigente Campesino Edickson Roberto Lemus, en la cual la fiscalía no ha hecho nada por esclarecer quienes son los autores materiales e intelectuales del asesinato del Dirigente Campesino. Recientemente asesinaron de manera brutal a una Dirigente Obrera, Altagracia Fuentes y sus compañeros, y al igual que el caso de Edickson, la fiscalía tampoco ha dado respuesta sobre los autores del asesinato. Por ende, nuestra lucha no solo se debe limitar a que se enjuicien a los fiscales corruptos, sino que debemos exigir que se esclarezcan, y se juzguen a los culpables de los asesinos de dirigentes populares y campesinos, la lucha contra la corrupción pasa por llevar justicia a los casos en que los fiscales no han actuado diligentemente provocando que actos criminales queden impunes.
Un movimiento amplio.
La huelga de hambre protagonizada por los fiscales, obtuvo un gran apoyo de la sociedad en general, logrando aunar a amplios sectores sociales como iglesias protestantes, el movimiento obrero y popular y muchas organizaciones no gubernamentales, etc. Claro está, el apoyo no es sorprendente, ya que la población está cansada del alza en los precios de consumo básico, la carestía de la vida, acompañada con el despilfarro y corrupción del actual gobierno de Mel Zelaya.
El mismo día que se realizo el segundo Paro Cívico Nacional, se nombro una Comisión de Notables que realizará la investigación sobre los casos de corrupción que los fiscales demandaron con el apoyo del movimiento obrero y popular. Esta comisión la integraran tres abogados designados por el propio congreso nacional. Estos serán propuestos de la siguiente manera; dos abogados propuestos por la Presidencia de la República, dos por la Corte Suprema de Justicia, dos por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), dos por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) y los últimos dos, por el Colegio de Abogados de Honduras. Como vemos, los políticos burgueses quieren llevar el descontento general a su terreno, que son las oficinas, en donde los burócratas acostumbran dar largas a los problemas sociales, maniobrando hasta que la opinión pública olvide los casos que dormirán el sueño de los justos.
No en vano uno de los imputados, Leónidas Rosa, fiscal general de la República declarara: “creo que no es necesario en un Estado de derecho apostar la vida por circunstancias que pueden ser solucionadas en el marco jurídico legal, ya que Honduras es un país que ha suscrito la enorme mayoría de convenciones internacionales que privilegian jurídicamente el derecho a la vida y estamos obligados a garantizarlo.” (La Tribuna 18/05/08)
A pesar de que el pastor protestante Evelio Reyes proclamara a los cuatro vientos que: “La suspensión de la huelga es una victoria porque hemos derrotado ese sentimiento de prepotencia, renace la esperanza y el pueblo organizado ha demostrado el vigor para luchar contra la corrupción” (Argenpress 18/05/08) La firma de los acuerdos y que se aceptara que la comisión de notables, realizara las investigaciones, es una maniobra de la burguesía. La verdad, es que la única forma de juzgar y garantizar que la corrupción no quede impune, es que sea el movimiento obrero y popular quienes impulsen la movilización para que se castigue a los corruptos.
Por ende hacemos un llamado a las todas las Centrales Obreras y a la CNRP, para que adopte la lucha que llevaban a cabo los fiscales y sigan impulsando movilizaciones en contra de la corrupción, pero sin dejar de lado la querella en contra de la carestía de la vida que actualmente agobia a todo el pueblo hondureño.