Miles de trabajadores panameños, de las diferentes centrales del país, junto a otras organizaciones del movimiento social, salieron a las calles a conmemorar del  Día Internacional de Trabajadores.

Fue una muestra de unidad desde las bases y de compromiso con la causa histórica de la clase obrera como señaló FRENADESO.

Diferencias políticas siguen subsistiendo a raíz de los compromisos de un sector del movimiento sindical con el Gobierno anterior y otros, que significó complicidad con políticas antiobreras, corrupción  y el avalar el sindicalismo amarillo, las violaciones de la libertad sindical, reformas laborales y el asesinato de obreros del SUNTRACS.

Otras diferencias tienen raíces en el oportunismo y las ansias de figuración de elementos que buscan políticamente encaramarse en el sacrificio, luchas y acumulado social de fuerzas sociales genuinas.

En fin, contradicciones y diferencias que se mantienen y que sólo podrán resolverse en el marco de un debate serio y una necesaria depuración que sirva para fortalecer el carácter clasista e independiente del movimiento sindical panameño, al igual que acontece en otras latitudes, pero esto no impidió que los miles de trabajadores se manifestaran al unísono en contra de las políticas represivas, antiobreras y pro patronales del Gobierno fascistoide de Ricardo Martinelli.

En la tarima de la Coordinadora de Lucha por el Respeto al Derecho a la Vida y Dignidad del Pueblo y FRENADESO, hablaron Mario Almanza (AMIA), Genaro López (CONUSI-SUNTRACS), Priscila Vásquez (Trabajadores de la Caja de Seguro Social, CSS), Saturnino Rodríguez (UIC), y representantes del FITO, FER-29, ASOPROF, ASEUPA, mujeres de las bananeras de Puerto Armuelles y del Colectivo de Mujeres Diana Morán, entre otros, hicieron uso de la palabra.

Todos los oradores coincidieron en la su fuerte crítica a la Ley de la criminalización de la protesta social, las reformas al Código de Trabajo, a la Caja de Seguro Social, contra el 7%, los proyectos hidroeléctricos y de minas a cielo abierto, al autoritarismo y desmanes

de Ricardo Martinelli.

Se exigió Justicia para los obreros del SUNTRACS asesinados y se demandó el fin de la Impunidad.

FRENADESO dedicó también esta jornada de lucha a Bety Cariño, luchadora social de Oaxaca asesinada recientemente, y declaró persona non grata y enemigo de la clase obrera, al Ministro de Gobierno, José Raúl Mulino, quien llamó a los obreros “maleantes de mierda”.

FRENADESO, junto a otros sectores, no sólo se movilizó en la ciudad capital sino también en David, Chiriquí; Changuinola, Bocas del Toro (TVN reportó 5 mil manifestantes); y en Las Palmas, Darién, donde participaron otros miles de trabajadores.

En Panamá, la marcha salió del Parque Porras y todas las delegaciones concluyeron en tres tarimas en la Plaza 5 de Mayo.