Las medidas de hecho han sido sujetas a nuestra vida universitaria a lo largo de su historia, no es porque no podamos hacer otra cosa que eso, sino es porque es la última instancia en la que cae un dialogo que nunca procede. Después de dos años y medio de estar en discusiones, diálogos y propuestas, la mesa última acordada en la apertura de la Universidad, después de un cierre de once días, fue y es la última vez que trataremos de resolver la problemática antes de deponer las medidas.
Esta lucha no se espera que cese rápidamente, "TODO O NADA" es nuestra consigna, los DERECHOS no se negocian SE DEFIENDEN. Es más que un hecho que nuestra casa de estudios es cada vez más reducida, desde que aquí las obligaciones y los cargos se volvieron una carrera politiquera, parece ser que en nuestra Universidad se gesta la ignorancia. Se han hecho cambios, por no decir que se han dado golpes al estudiantado, las medidas que han tomado son parciales, el que a un estudiante se le aplique un plan de repitencia y a un catedrático se le estime a pesar de su falta de preparación pedagógica y didáctica sin mencionar que no son especialistas en sus respectivas ramas; como es posible que se juzgue la admisión a la educación superior dependiendo el Colegio en que se estudió y no según las aptitudes personales; es acaso conveniente que a la Universidad no se le esté dando el presupuesto que debe de ser y que se profundice un sentimiento de quiebra. La indiferencia que hoy nos acosa o mejor dicho el esfuerzo que hacen nuestras autoridades para mantenernos en la ignorancia llega a tal extremo que no nos preocupa que en las diferentes unidades académicas y aun en las nuestras, los procesos electorales se vean entorpecidos con amparos ridículos que lo único que expresan es la sed de poder y el temor a no cumplir todos los favores políticos de los que se acreditaron las autoridades durante sus periodos administrativos. La farsa resolución llamada mesa de dialogo, jamás podrá conducir a la solución de la problemática, si lo que se pide es respeto a nuestra soberanía. EL QUE LA ACADEMIA DE ESTA UNIVERSIDAD SEA CAMBIADA POR POLITIQUERIA. ¿Acaso esto no es para preocuparse y tomar medidas de hecho?
Hoy en nuestra Universidad estalla la inconformidad que se mantiene en los sectores estudiantiles, personal administrativo y de mantenimiento, catedráticos y profesionales. Es tal que el único mecanismo de defensa que han podido manejar nuestras autoridades es la represión y el partimiento de nuestros bloques, como ha sido el caso de los compañeros de Ciencias Económicas que fueron golpeados por grupos amparados por el señor Decano, ya que ellos se han propuesto en defender los derechos estudiantiles; así como los compañeros de Ingeniería que al afrontar a las autoridades por un cobro excesivo y sin previo aviso que se dio en los laboratorios de escuela de vacaciones, tomaron los edificios en señal de protesta y hoy mantienen un proceso de expulsión, sin contar que los compañeros trabajadores administrativos y de mantenimiento que han sido víctimas de represión política, acoso sexual y amenazas personales.
Esta lucha no pude darse a largas, esta lucha no debe dilatarse mediante procesos burocráticos absurdos, esta lucha es de una decisión final, la que conlleva al respeto de los derechos humanos y a la soberanía del pueblo o legitimar la institución de la hipócrita democracia en la que se ha convertido esta casa de estudio. Enardecidos por el desprecio a los menos favorecidos, la violación constante de los derechos laborales y el bienestar académico, del favoritismo político bajo el cual son contratados docentes y trabajadores. Hoy decidimos tomar la Universidad y no concederles ni un día más a estas "autoridades" para que pongan un pie dentro de esta tierra sagrada que han desprestigiado con sus actos día a día, la Universidad entra en paro indefinido y va por sobre cualquier asignatura, laboratorio, examen, graduación y cualquier otra situación hoy luchamos por mantener nuestros derechos.