El giro oportunista de la oligarquía en Honduras
A escasas dos semanas de la realización de las elecciones generales del 24 de noviembre en Honduras, sectores de la oligarquía comienzan a coquetear con Xiomara Castro, candidata presidencial del partido Libertad y Refundación (LIBRE). En una reciente actividad electoral del partido LIBRE, donde Xiomara Castro presentaba su programa de gobierno a los empresarios, estuvo presente Adolfo Facussé, presidente de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI) y nada menos que Lisa Kubiske, embajadora norteamericana en Tegucigalpa.
Facussé es conocido por su público apoyo al golpe de Estado que derrocó al presidente Manuel Zelaya en el año 2009. Contrario a que se puede creer, Facusse se ha distanciado de Juan Orlando Hernández, candidato del gobernante Partido Nacional.
Adolfo Facussé ha acusado a Juan Orlando Hernández de ser “un pequeño dictador en ciernes. Él ha destruido el sistema de separación de poderes, destituyó sin procedimiento a cuatro magistrados de la Corte Suprema, su partido presionó hasta controlar la fiscalía, bajo este gobierno ha habido una corrupción enorme y un despilfarro tremendo y somos el país más violento del mundo. Hay que cambiar (...)” (El Pais, 8/11/2013).
Estas declaraciones no las da un luchador por la democracia, sino un rico empresario que ha demostrado ser un camaleón político. Esta aparente defensa del sistema democrático no es creíble en Facussé, puesto que son los mismos argumentos que un momento utilizaron para organizar y ejecutar el golpe de Estado.
En la entrevista al diario El País de España, Facussé se muestra preocupado por el crecimiento de la pobreza en Honduras: “¿De qué nos sirve a nosotros una población muerta de hambre? ¿Qué negocio hacemos nosotros?”. Y a reglón seguido confiesa que apuesta por “un gobierno de izquierdas que llegue a un acuerdo con la empresa privada, estamos con Xiomara siempre que no instigue la confrontación”.
Y para mayor sorpresa, Facussé aunque no se pronuncia abiertamente por una Asamblea Nacional Constituyente, ahora dice estar de acuerdo que haya una revisión de la antidemocrática Constitución de 1982:“Que se cree una asamblea revisora o independiente donde puedan ir los talentos que tiene el pueblo hondureño. Gente capaz, inteligente y honesta que busque un consenso para la transformación de Honduras, y se someta a un plebiscito”.
Esta situación era previsible. La crisis económica ha catapultado al partido LIBRE, la desesperación ante la interminable violencia y el deterioro de los niveles de la vida, está empujando a las amplias masas a buscar un cambio de gobierno, y como no lo han podido hacer a través de las luchas, existe la creencia general que cambiando el gobierno cambiará la situación en los hogares.
Entonces, el giro oportunista de la oligarquía, de la cual Facussé es uno de los más conspicuos representantes, indican que se están preparando para desvirtuar una posible victoria electoral de LIBRE. Los que antes eran enemigos abiertos, ahora fingen ser amigos o aliados.
Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) hemos llamado a votar críticamente por los candidatos luchadores del partido LIBRE, como un paso necesario para instaurar un nuevo gobierno, pero al mismo tiempo hemos llamado a luchar por un gobierno del partido LIBRE, pero sin burgueses.
Facussé con su giro oportunista nos demuestra que ellos se están preparando para exigir cuotas de poder y nombramiento de ministros y altos funcionarios. Con ello pretende torcer el rumbo de cualquier victoria del partido LIBRE, por eso no nos cansaremos de llamar a las bases, a los trabajadores, a mantenernos alertas contra esos lobos disfrazados de mansos corderos.