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Dos razones para no ratificar el proyecto de derecha, en las elecciones 2009.
Se ha intentado presentar la crisis actual en el país, como resultado exclusivo de factores externos y no como resultado de 19 años de respaldo y entrega al sector privado nacional y trasnacional los bienes del estado; abandonando los sectoresproductivos medio y pequeño del país.
El partido ARENA es el instrumento político mayor de los círculos de poder y de las multinacionales en el país; por tanto, un nuevo gobierno de ARENA conllevaría para aquellos sectores que no han encontrado en él, representación alguna, nefastas consecuencias. Exponemos aquí, dos razones para que los olvidados y excluidos de siempre no ratifiquen el proyecto de derecha, en las elecciones 2009.
1. El partido en el gobierno, ARENA, se encuentra en una encrucijada histórica, en presencia de una nueva contienda electoral que le puede implicar una derrota sin precedente en las urnas. Esto está provocando que empresas como la minera, Pacific Rim en Cabañas, se encuentren en una difícil situación: por un lado comunidades que ya se ven afectadas por la actividad minera (que en este momento solo significa explorar) han expresado su total desacuerdo a esta actividad.
Por el otro lado, la compañía se siente huérfana, pues como lo ha expresado Tom Shrake, presidente y director ejecutivo de la minera: "desafortunadamente, el gobierno de El Salvador ha detenido el proceso”, es decir, la empresa no encuentra el respaldo deseado en el gobierno.
La actitud mostrada por el gobierno es lo que el pecenista Orlando Arévalo, promotor de una nueva Ley de Minería y defensor de los intereses económicos de Pacific Rim, llama "temor electoral" de parte de Arena. Razón por la que ARENA ha dejado de mostrar pública y abiertamente su apoyo incondicional con estos proyectos, sabedores que hacerlo implica un elevado costo político que no están en condiciones para experimentar.
En este sentido, los comicios electorales del próximo año cobran importancia para el bienestar de las comunidades. Puesto que, de ser ratificado el proyecto político de ARENA con la presidencia, una buena cuota de diputados y alcaldes, se estarán ratificando proyectos, como los mineros en el país. Siendo, las elecciones 2009 y la denuncia pública de las comunidades, las que continúan impidiendo que los partidos de derecha expresen su gratitud con la empresa, aprobando en la asamblea legislativa la nueva ley de minería en el país. Comunidades y organizaciones sociales deben en este sentido, hacer el mayor esfuerzo porque se garantice la no aprobación de esta ley, y ver a estas empresas afuera del país. De no ser así, de ser aprobada esta ley en un madrugón como es costumbre, el pueblo debe pasar la factura, como lo a dicho el arzobispo de San Salvador, Fernando Sáenz Lacalle: "hay que ver cuáles y de qué partido son los diputados que la firman o aprueban esta ley, porque serían todos los responsables de todos los efectos peligrosísimos y desastrosos para la salud humana y para los animales".
2. La segunda razón, se halla en la edición 33 de Abriendo Brecha. La crisis actual podrá considerarse extensa y profunda, pero no será la crisis final que ARENA habrá impuesto al pueblo salvadoreño de continuar en la dirección del gobierno central. Puesto que, un nuevo gobierno con ARENA en el poder, será ratificar los “resultados de 20 años de gobierno y el éxito de esa política gubernamental tiene postrado al país, sin moneda propia, sin agricultura, sin seguridad alimentaría, sin empleo, sin salud, sin vivienda, sin educación, sin patria, sin sueño propio, desangrándose en el desierto de Arizona y con una delincuencia invencible y poderosa”.