Nuevamente, los trabajadores de los países que conformamos la nación Centroamericana, nos preparamos para conmemorar un aniversario más de la masacre de Chicago, ocurrida el 1 de Mayo de 1886 en Estados Unidos, hace 127 años.
1.- Efectos de la ofensiva neoliberal
Desde entonces, la fecha del 1 de Mayo está asociada a las luchas obreras, por la jornada de 8 horas y la obtención de nuevas conquistas laborales y sociales. La actual crisis del capitalismo mundial está destrozando esas conquistas que fueron obtenidas con décadas de luchas y movilizaciones: la jornada de 8 horas es una ficción, tenemos que trabajar más por salarios que se deterioran día a día, producto de las devaluaciones o deslizamientos de las monedas en relación al dólar, y por los efectos de la inflación en cada país. Los ataques a la seguridad social se han multiplicado, la pensión de jubilación no permite vivir dignamente, etc.
A partir de 1990, cuando se produjo la derrota de las guerrillas y de la revolución en Centroamérica, enfrentamos una voraz ofensiva neoliberal que en el transcurso del tiempo ha desmantelado las pocas industrias, transformando a nuestros países en el agro de Estados Unidos, en vagones desvencijados que son arrastrados por la locomotora norteamericana.
La desarticulación de las economías de nuestros países, y la conversión de estos en pequeñas piezas accesorias, subordinadas y dependientes de la metrópoli norteamericana, han producido una desestructuración de las clases sociales. A su vez, este proceso decadente ha tenido graves repercusiones sobre el movimiento sindical, creando desconcierto y ausencia de una perspectiva clara.
La clase obrera que se formó en la década de los años 60 y 70 del siglo XX bajo el proceso de sustitución de importaciones impulsado por el Mercado Común Centroamericano (MCCA) ya no existe, y con ello han desaparecido una buena parte de las tradiciones sindicales y de lucha.
El nuevo rol que el imperialismo mundial asignó a nuestros países en la división internacional del trabajo es el de producción de materias primas y alimentos, brutal explotación de la mano de obra en maquilas y consolidación del área centroamericana como un polo turístico. La nueva clase trabajadora de las maquilas es extremadamente joven, compuesta en su mayoría por mujeres, madres solteras y jóvenes de ambos sexos excluidos de estudios universitarios, con bajísimos niveles de organización sindical, con escasa tradición de lucha y sometidos al esclavismo industrial. Esta clase obrera maquilera es un gigante dormido y encadenado.
Los permanentes planes de ajuste económico, los efectos devastadores de los tratados de libre comercio, especialmente el CAFTA-DR con Estados Unidos, y ahora el Acuerdo de Asociación (AA) con la Unión Europea, se han hecho sentir negativamente sobre el conjunto de la clase trabajadora, con sus consecuencias de desempleo, bajos salarios, desorganización y dispersión que ante la ausencia de luchas terminan en grandes oleadas migratorias de hermanos y hermanas que huyen de la miseria imperante.
2.- Narcotráfico, violencia y bancarrota de los Estados nacionales
El déficit fiscal y el creciente endeudamiento es la regla general en todos los Estados de Centroamérica, sin excepción. Los Estados nacionales, que surgieron de la desmembración del Estado Federal, están en completa bancarrota, ya no pueden sostener sus propios gastos mínimos ni los precarios presupuestos.
Ante el fenómeno del narcotráfico, los Estados en Centroamérica resultan incapaces de controlar este flagelo con sus propios medios, y están forzados a endeudarse para pagar las planillas de las fuerzas policiales y militares, que resultan insuficientes y son permeables a la corrupción y la infiltración de los carteles de la droga.
Centroamérica es actualmente la región más violenta del mundo, con los más altos índices de criminalidad y muertes violentas. Y es que la descomposición que produce la crisis del capitalismo avienta a decenas de miles de jóvenes al desempleo permanente y a la marginalidad social, los que terminan organizándose en “maras” o pandillas. Una parte de estas termina siendo base social de los ejércitos del narcotráfico y de delincuencia organizada.
3.- Luchas de resistencia en la región
Aunque las luchas de resistencia de los trabajadores contra la ofensiva neoliberal han disminuido significativamente, ello no significa que no se han producido. La situación es dura y compleja para los trabajadores, pero la crisis del capitalismo nos obliga una y otra vez a luchar por la sobrevivencia de nuestras familias.
Ante el debilitamiento de la tradicional clase obrera industrial, han pasado a la lucha los empleados públicos, especialmente del sector salud y educación, presionados constantemente por la aguda crisis fiscal que carcome los exiguos presupuestos de todos los Estados de la nación Centroamericana.
En el último periodo, en Guatemala, producto de los altos índices de hambre y desnutrición, se ha producido un ascenso de las luchas campesinas e indígenas, que presionan por el derecho a la tierra y el derecho a comer. El agro guatemalteco es un enorme hervidero social.
Los estudiantes universitarios han acompañado estas luchas, pero los grandes ausentes siguen siendo los trabajadores urbanos. Los maestros y salubristas han librado algunas peleas puntuales, pero no logran retomar la ofensiva contra los efectos de la crisis capitalista.
En Guatemala los trabajadores debemos ser la vanguardia de lucha contra la impunidad. El juicio contra el general Efraín Ríos Mont nos hace recordar el largo periodo de terror contrarrevolucionario y de asesinatos contra dirigentes sindicales y populares, que todavía se producen aunque en menor escala. En Guatemala la derecha se ha unido para obstaculizar el juicio por genocidio contra el general Efraín Ríos Mont y su jefe de inteligencia José Mauricio Rodríguez. Desde el presidente Pérez Molina, el organismo judicial, la Corte de Constitucionalidad, hasta las agrupaciones ultraderechistas de militares retirados y sus familiares, pretenden tergiversar la historia y negar el asesinato sistemático de decenas de miles de civiles, indígenas en su mayoría, para salvar de la justicia a estos criminales. Exigimos justicia para las víctimas, indemnización para sus familiares y cárcel para los culpables!!.
En El Salvador, las organizaciones gremiales del magisterio han salido a la calle a reclamar aumentos de salarios, pero los grandes sindicatos controlados por el gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) han bloqueado desde adentro las luchas.
De igual forma, los sindicatos del sector salud han luchado contra el deterioro del sistema de salud, los bajos salarios y las precarias condiciones de trabajo, pero no tienen la fuerza suficiente para revertir la situación.
En Honduras, el ascenso de luchas que produjo la lucha contra el golpe de Estado del 2009, llegó a su fin. La crisis económica y fiscal es tan aguda que a diario se producen pequeñas pero dispersas luchas defensivas de los empleados públicos, en la mayoría de los casos por el pago de los salarios. Los trabajadores hospitalarios han luchado contra el desplome del servicio de salud, pero tampoco logran revertir la situación.
El magisterio, otrora vanguardia de las luchas, se encuentra postrado después que el gobierno de Porfirio Lobo logró destruir en los hechos las enormes conquistas laborales del Estatuto Docente.
En el campo, los campesinos del Bajo Aguán luchan por un pedazo de tierra donde sembrar, pero son masacrados por las bandas de terratenientes que son apoyadas por el ejército y la policía
En Nicaragua, la vanguardia de las luchas obreras han sido los trabajadores ancianos que por más de 3 años han reclamado el pago de la pensión de jubilación reducida, a la que legalmente tienen derecho.
En Costa Rica, bajo el gobierno de Laura Chinchilla se ha intensificado la ofensiva por reducir el déficit fiscal por la vía de destruir el salario real que representan los “pluses” para los trabajadores del sector público. La repuesta de los empleados públicos ha sido la movilización, pero esta no ha logrado romper el tope salarial impuesto por el gobierno. Maestros y empleados de la salud, han sido los abanderados de la defensa del salario.
En Panamá, a pesar del espejismo creado por las obras de ampliación del Canal, los empleados del sistema de salud y los maestros, son los sectores que han pasado a la lucha por el aumento de salarios. La reciente huelga nacional de enfermeras por aumentos de salarios, así lo confirma. Por su parte, los indígenas son los abanderados de la lucha por la defensa de los recursos naturales y del medio ambiente.
La crisis del capitalismo es tan fuerte en Centroamérica, que en el mes de abril del año en curso hemos presenciado un hecho insólito: huelga de policías en Costa Rica y Honduras, reclamando aumento de salarios y mejores condiciones de trabajo!!
4.- ¡!Fuera Obama de Centroamérica!!
El presidente Barack Obama tiene previsto arribar a Costa Rica los días 3 y 4 de Mayo para asistir a la cumbre de presidentes del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), cuya agenda ha sido mantenida en el más absoluto secreto. Es la segunda ocasión que Obama visita Centroamérica.
Bajo el auspicio directo de Estados Unidos, el SICA fue fundado en Diciembre de 1991, cuando finalizó la revolución y la guerra civil en Centroamérica. Este organismo regional está conformado por Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. República Dominicana participa como Estado asociado.
La visita de Obama no es una casualidad. En el último periodo Costa Rica ha propuesto una serie de modificaciones al tratado constitutivo del SICA, que incluyen modificaciones a las funciones de la Secretaria General, la creación de una Secretaría de Seguridad Democrática (SSD), encargada de coordinar la lucha contra el narcotráfico, modificar las competencias de la Corte Centroamericana de Justicia (CCJ) y reformar el funcionamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y la instalación de un Consejo Permanente del SICA con sede permanente en San Salvador.
Sin lugar a dudas, Obama viene a bendecir las reformas al SICA. Toda la “ayuda” económica prometida en el marco del CARSI y de la lucha contra el narcotráfico se transforma en un mecanismo de dominación y control sobre los débiles gobiernos del área, que no pueden con sus propios recursos librar una lucha efectiva contra los carteles del narcotráfico.
Se calcula que un 84% de la cocaína destinada a EE.UU. pasa por Centroamérica, dejando una estela de corrupción y muertes. Mientras Estados Unidos sea el gran consumidor de drogas, Centroamérica estará sometida al flagelo del narcotráfico y sus secuelas. La única salida posible al problema del narcotráfico es la legalización de las drogas y que los Estados utilicen esos recursos para fomentar la educación de la población.
Lejos de promover la integración regional, el SICA ha servido para transformar a Centroamérica en una zona de libre comercio, súper vigilada por Estados Unidos, en un verdadero paraíso de las transnacionales.
EL SICA promueve el libre comercio intrarregional pero no la creación de un Estado centroamericano. Todo lo contrario, crea mecanismos institucionales para que esto no ocurra. Mientras los empresarios y los gobiernos promueven una mayor coordinación entre ellos, las centrales obreras y campesinas, sindicatos y demás organismos populares del área seguimos luchando por separado.
En realidad, la reunificación de Centroamérica no será producto de tratados internacionales alentados por el imperialismo norteamericano y las oligarquías, sino por la lucha conjunta de los trabajadores de todos nuestros países contra el imperialismo norteamericano y sus agentes.
Una tarea histórica del movimiento obrero y sindical es retomar las banderas del antiimperialismo, la lucha por una nueva independencia política, por la reunificación de la patria Centroamericana bajo la forma de un Estado Federal Socialista.
5.- Se requiere un Plan de Lucha Unitario
En todos los países que conforman la nación Centroamericana, los trabajadores enfrentamos los mismos problemas. Por ello, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) no se cansará de llamar a los trabajadores y a las centrales obreras, para impulsar un Plan de Lucha Unitario que, a nuestro juicio, debe contener las siguientes reivindicaciones mínimas:
5.1.- ¡¡Es urgente luchar por aumentos generales de salarios, acordes a la carestía de la vida!!. Las constantes alzas de los precios de la canasta básica y los servicios públicos, obligan a millones de trabajadores a luchar por la defensa del pan de cada día para alimentar a nuestras familias
5.2.- ¡¡Abajo los paquetazos de reformas fiscales contra los trabajadores y la clase media!! En toda Centroamérica, los diferentes gobiernos están implementando los mismos planes de reformas fiscales cuyo principal objetivo es financiar el déficit fiscal de los Estados en bancarrota, a costa del nivel de vida de los trabajadores y las clases medias. La repuesta de la clase trabajadora debe ser tajante: ¡¡que los ricos paguen más impuestos!!
5.3.- ¡¡Por la defensa de la seguridad social: opongámonos a la elevación de la edad de jubilación!! El FMI ha girado instrucciones a los gobiernos del mundo, incluido los de Centroamérica, de elevar automáticamente la edad de jubilación, debido, supuestamente, a que han subido las expectativas de vida.
¡¡Nada más falso!! Es posible que en los países imperialistas el todavía relativamente alto nivel de vida permita vivir más, pero en Centroamérica es absolutamente falso que la gente viva más. Nuestros hermanos mueren prematuramente por mala atención médica y por pensiones insuficientes que no ajustan para vivir. Se deben revalorizar las pensiones conforme el costo de la vida, y la seguridad social debe cubrir a todos los trabajadores
5.4.- ¡¡Por la defensa y renacionalización de los servicios públicos (energía, comunicaciones, salud y educación) !! Después de la derrota de la revolución en Centroamérica, el huracán neoliberal terminó de desarticular nuestros países, convirtiendo la región en una zona de libre comercio de las transnacionales imperialistas.
En algunos casos estos servicios fueron privatizados total o parcialmente. En otros casos, como en Honduras, ya están planificando la privatización de la ENEE y HONDUTEL. Los servicios públicos deben estar en manos del Estado, bajo el control de los trabajadores.
Por la defensa de la educación pública con calidad!! Necesitamos recuperar la educación pública gratuita y de calidad, en todos los niveles, para nuestros hijos. De igual manera, necesitamos recuperar los servicios de salud para los trabajadores y los pobres.
Los sindicatos magisteriales y de la salud en toda Centroamérica deben marchar unidos en la defensa y reconquista de estos beneficios sociales, cuando la crisis aprieta a la clase trabajadora.
5.5.- ¡¡Por una reforma agraria que acabe con el latifundio y brinde financiamiento barato a los campesinos e indígenas!! En Guatemala decenas de miles de campesinos e indígenas reclaman tierras y el derecho a comer. En Honduras, continúan la lucha de miles de campesinos por una nueva reforma agraria.
Exigimos cese la masacre contra los dirigentes campesinos del Bajo Aguan, castigo y cárcel para los culpables. Por la defensa de las tradiciones, idiomas y cultura de los pueblos originarios, sometidos al hambre y miseria por las políticas discriminatorios en todos los Estados de Centroamérica
5.6.- ¡¡No a las empresas mineras e hidroeléctricas que dañan el medio ambiente!! Desde Guatemala hasta Panamá la lucha por la defensa de los recursos naturales y el medio ambiente es la misma. En su afán de lucrar a toda costa, las trasnacionales y los capitalistas de la región han emprendido la explotación de metales, minerales, petróleo y producción de energía eléctrica que deteriora el medio ambiente y afecta los territorios de las comunidades campesinas e indígenas. Defendemos el derecho de los pueblos a ser consultados y el respeto de sus territorios.
5.7.- ¡¡Por la independencia y democratización de las organizaciones y centrales obreras y campesinas!!En esta época de decadencia del capitalismo y del imperialismo, los Estados fallidos de la burguesía en Centroamérica han logrado subordinar a la mayoría de las centrales obreras y campesinas a los dictados del FMI, liquidando la independencia y autonomía de los sindicatos.
Necesitamos una democratización de los sindicatos, para que las bases decidan como y cuando luchar contra la crisis del sistema capitalista, que nos asfixia a diario.
5.8.- ¡¡Por la unidad de acción de las centrales obreras y campesinas, sindicatos y demás organismo populares de Centroamérica!! La crisis del sistema capitalista nos obliga a superar cualquier diferencia política, ideológica o religiosa, para poder librar con éxito la lucha por la defensa y reconquista de los beneficios laborales obtenidos en el periodo anterior. Solo la lucha firme, organizada y unitaria de la clase trabajadora, podrá hacer que los trabajadores defendamos y mejoremos nuestros niveles de vida.
5.9.- ¡!Fuera Barack Obama!! Llamamos a toda la clase trabajadora, a las centrales obreras, campesinas y populares de Centroamérica, a repudiar esta segunda visita de Barack Obama. En todas las marchas deben ir mantas y pancartas rechazando y repudiando la intromisión del máximo representante del imperialismo norteamericano.
La clase trabajadora centroamericana debe convertirse en la vanguardia de la lucha democrática y por una nueva independencia política.
5.10.- ¡¡Por la reunificación socialista de la Patria Centroamericana!! El sistema capitalista e imperialista es el principal enemigo de los trabajadores y de la humanidad. En Centroamérica la lucha democrática y antimperialista por la liberación nacional conduce inevitablemente a la lucha por el socialismo.
En la actual coyuntura, la lucha por las reivindicaciones democráticas exige la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente en cada uno de nuestros países, y también pone a la orden del día la necesidad de convocar a una gran Asamblea Constituyente Centroamericana que nos permita reunificar la patria centroamericana, reconstruir el Estado Federal, pero ahora bajo un gobierno de los trabajadores y en rumbo al socialismo.
Centroamérica, 25 de Abril del 2013
Secretariado Centroamericano
Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)