Por Mario Carranza
El final del año anterior, estuvo marcado por los despidos de empleados públicos y privados asi como por los desalojos de sus puestos de trabajo de cientos de personas que su único pecado contra la burguesía y los gobiernos locales administrados por los diferentes partidos políticos; es ganarse la vida en las calles con sus ventas informales; lo que de alguna manera le causan cierta malestar a los gobernantes y que ha juicio de los mismos dan mala presentación a las ciudades; pero como a grandes males; grandes remedios, el pueblo tiene que trabajar de esa manera para combatir la terrible enfermedad del hambre, la que la agudización de la crisis del sistema capitalista y las políticas despoticadas del gobierno de Mauricio Funes y del FMLN continúan empujando a cientos de personas a esta práctica como alternativa, u otras que aseguraren la existencia a sus familias.
Gobierno de Funes y del FMLN debe proteger a los trabajadores
Mientras los altos funcionarios que se desempeñaron en los gobiernos de ARENA sobre todo de la administración Saca y que continuaron con el gobierno del FMLN y de Mauricio Funes se mantienen en sus puestos, los empleados públicos de base son despedidos, dichos despidos se han visto incrementados a finales del 2010 e inicios del 2011, entre los despedidos se encuentran personas pertenecientes a organizaciones sindicales, como ejemplo las personas trabajadoras de la Secretaria de Cultura y miembros del SITRASEC; con los despidos se han visto afectadas personas que trabajan en varia instituciones del Estado como lo es el caso, de empleados del sector de salud, educación, de la Sinfónica Nacional, Secretaría de la Cultura (Secultura), Instituto del Seguro Social (ISSS), Ministerio de Obras Públicas (MOP), área de comunicaciones de Casa Presidencial (Capres), Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (Isdemu), etc. En las mayorías de casos los despedidos se han realizado bajos los argumentos de problemas disciplinarios, o pérdida de confianza.
Aumento de energía eléctrica para desproteger a más
En un vespertino del día sábado 8 de enero de 2011, el señor Presidente Mauricio Funes anuncio sin inmutarse que a partir de este mes la tarifa de la energía eléctrica será incrementada en un 8% lo que significa que muchos servicios que hacen uso de la energía eléctrica, también tendrán que subir, lo que se vera reflejado indiscutiblemente en la ya deteriorada economía salvadoreña. En otra parte manifestó el mandatario que de ahora en adelante se revisaran los costos de la energía eléctrica cada tres meses, lo que permitirá y que es casi seguro se incremente a tan necesario recurso, porque es poco probable de que este baje cada tres meses.
Al incrementarse el precio de la energía eléctrica este se reflejara en la factura y el sacrificio que se está haciendo para mantener una factura baja para lograr el subsidio o el medio subsidio al gas será en vano, de esa manera perderemos el anhelado subsidio que a la larga no será ningún beneficio para la clase trabajadora, el campesinado, los pueblos originarios y demás sectores populares ya que prometen dárselo pero al mismo tiempo crean mecanismos para que no aplicarlo; todos parece que el retraso en la aplicación del subsidio al gas no fue por aspectos técnicos sino más bien lo que buscaban era que el costo de la energía subiera; de esa manera ahora se tendrá que pagar más de $15 dólares por el cilindro de gas, lo cual obligadamente incrementara hasta el precio de las tortillas y obligara a que las personas recurran a utilizar leña en las labores de cocina, lo que trae efectos negativos para el medio ambiente y la salud de las personas sobre todo a nivel de las vías aéreas.
Por una coordinadora de lucha
Ante la situación actual el Partido Socialista Centroamericano, PSOCA llama a los trabajadores públicos y privados, campesinos, pueblos originarios y demás sectores populares a dar una respuesta unitaria para lo cual es necesario la conformación de una coordinadora de lucha conformada por los trabajadores, campesinos, pueblos originarios y demás sectores populares asi mismo considera que las organizaciones sindicales deben de llamar a la movilización y convocar a la huelga.