Por Abelardo Maturana
El Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) rinde un sencillo homenaje al insigne revolucionario recientemente fallecido, a los 92 años de edad, Alfonso Bauer Paiz, abogado laboralista y defensor de los intereses de la clase trabajadora y campesina de Guatemala.
Nacido en 1918, hijo del periodista salvadoreño Carlos Bauer Avilés y de la guatemalteca Abigail Paiz, conocido por la generación de luchadores sociales actuales como Don Poncho, se gradúo de abogado y notario en la Universidad San Carlos (USAC), participó activamente el revolución democrática de 1944-1954, siendo diputado nacional a sus 26 años.
Durante el primer gobierno de la revolución fue subsecretario de trabajo y uno de los creadores del vigente Código de Trabajo, una de las grandes conquistas de esta revolución para la clase trabajadora, fue Ministro de Economía y Trabajo y miembro de la junta monetaria del Banco de Guatemala. En el segundo gobierno revolucionario se desempeñó como gerente general del Departamento de Fincas Nacionales a cargo de aplicar la reforma agraria y presidente del Banco Nacional Agrario, cuya finalidad era dar crédito a los campesinos beneficiados por la reforma agraria.
Ejerció la docencia en las Facultades de Ciencias Jurídicas y Sociales así como en la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Superior Universitario de la USAC, esta instancia le pide que junto a otros connotados intelectuales haga un estudio sobre la explotación de níquel en el departamento de Izabal, poniendo en evidencia el saqueo y destrucción de los recursos naturales, eso en la década de los 70s. Don Poncho fue el único sobreviviente de los autores de este estudio, asesinados por el ejército.
Vivió en el exilio varias veces en México y Nicaragua, en este último país fue asesor del Ministerio de Trabajo durante la Revolución Sandinista. A finales de la década de los 80s estando en México trabajó como asesor legal de los refugiados desplazados por el terror del Estado que se habían ido a ese país, y fue uno de los que apoyó el retorno de estos a inicios de los 90s. Recientemente era un investigador del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES) de la Facultad de Económicas de la USAC. Secaida miraba en Don Poncho una conciencia crítica a su gestión como decano, por el apoyo que este brindo al colectivo Estudiantes Por la Autonomía (EPA) durante los 54 días de toma de las instalaciones universitarias. Por su participación en esta lucha y posteriormente su participación en el proceso de reforma actual de la U, fue despedido de la USAC por el decano Rolando Secaida, quien ha sido acusado de corrupción y reelección ilegal del cargo, además de ser un testaferro de la burguesía azucarera.
Esa situación sin duda le complicó la salud a don Poncho, teniendo las autoridades universitarias actuales responsabilidad de su muerte. Don Poncho murió el 10 de julio de 2011. En el acto fúnebre político realizado en el Paraninfo Universitario se rindió un homenaje como a un revolucionario merece, con la presencia de organizaciones sindicales, campesinas, estudiantiles, de mujeres, de izquierda reformista y revolucionara, etc. Se realizó una marcha hacia el Museo Universitario (MUSAC) llevándolo posteriormente al cementerio de los Cipresales. En el acto las corruptas autoridades de la universidad querían tener presencia, pero familiares, amigos y organizaciones populares lo negaron.
Su ejemplo se vuelve ahora instrumento para continuar el proyecto de la revolución guatemalteca, centroamericana y mundial. Ya no se le vera más en las marchas del 1 de mayo, del 20 de octubre, del 30 de junio, pero su ausencia física no apagara la claridad de sus certeras reprendas o puteadas políticas. Compañero Alfonso Bauer Paiz: Hasta la reunificación socialista de Centroamérica, Siempre!!