Represión en las empresas de los Castillo
Por Leonardo Ixim
Si alguien tiene dudas del tipo de socialdemocracia que este gobierno pregona, los hechos de la realidad lo pueden demostrar, es el de la vacilación a la oligarquía con respecto a la propuesta de precios topes y en lo que se refiere a los aumentos salariales para poner algunos ejemplos; pero cuando se toca directamente los intereses del gran capital, el gobierno y el estado, que no es exactamente lo mismo, sale a defender a los malditos ricos. Ese es el caso de los camaradas del Sintrapeten, sindicato de una de las empresas del grupo de los Castillo, uno de los grupos empresariales mas poderosos, dueños de la cervecería del mismo nombre y de la empresa de aguas gaseosas Salvavidas.
Los compas son trabajadores de la empresa Distribuidora Peten, que se encarga de distribuir agua pura, una de las tantas empresas de dicho grupo. La patronal ha usado la técnica de la terciarizacion y descentralización en varias empresas como forma de fragmentar la conciencia y organización de clase de los trabajadores, pero en el caso de dicha empresa no lo han podido lograr.
El Sintrapeten ha logrado conseguir después de mucha espera (desde febrero de 2007) la legalización como sindicato, durante ese tiempo a pesar de ampararse en el Código de Trabajo y en convenios internacionales sobre derechos laborales el Ministerio de Trabajo les negaba la autorización, hasta que lo lograron a fines de abril su cometido, en esta situación la patronal demostrando toda la cavernaria visión sobre derechos laborales los despiden al momento de tener su legalización o los trasladan a otras empresas del grupo.
Los métodos terroristas para obligar a los trabajadores fue obligarlos asistir a varias reuniones y supuestos talleres de capacitación en varios hoteles de la capital y obligarlos a hacerlos renunciar, para eso cerraron las puertas de los salones donde estaban cautivos y llegaron con grupos de personas armadas, posteriormente los dejaran libres. Ante esta acción intimidatoria que es claramente un secuestro, se hace imperativo la responsabilidad penal, pero ¿Quiénes tienen las leyes?, los empresarios claramente, ante eso la movilización popular en solidaridad con los camaradas es la única vía de hacer cumplir la ley para el trabajador.
Sorpresivamente la empresa se declara en quiebra, despidiendo y trasladando a otros, ante eso los trabajadores se establecen dentro de la empresa, posicionándose ahí desde el 3 de mayo, pero la reacciones represivas de la patronal no se hicieron esperar y fueron violentamente golpeados los siguientes compañeros Adrián Francisco Tale, Marco Antonio Franco, Freddy Valdemar Jerónimo, Juan Pablo Gonzáles, al igual que a Edwin Álvarez secretario General provisional del sindicato en formación.
Las medidas represivas no pararon ahí y el día siguiente el cuerpo antimotines de la Policía Nacional Civil y policías privadas desalojaron a los compañeros de las instalaciones de la empresa usando métodos nuevamente violentos, lo cual obligo a los trabajadores a instalarse en las aceras de afuera de la empresa donde se encuentran actualmente. Posteriormente han seguido siendo intimidados en las noches pues llegan carros sin placas y pasan lentamente enfrente de ellos, desde ya responsabilizamos a la patronal, al grupo Castillo de cualquier incidente que peligre la vida de los camaradas.
Las exigencias del sindicato son claras, primero y mas importante su reinstalación, después su estabilidad laboral y la negociación de convenios colectivos, mejoras salarias y condiciones laborales justas. Se esta esperando la resolución del Ministerio de Trabajo que debe ser el reinstalo inmediato de todos los trabajadores despedidos así como el regreso de los trasladados, en la actualidad la empresa se encuentra emplazada en el Ministerio de Trabajo.
De parte del gobierno su obligaciones de cumplir los derechos laborales, tal como manda la Constitución de la Republica, el Código de Trabajo y los convenios internacionales en la materia; en su campaña el presidente Colon prometió luchar por los pobres pero en la practica este gobierno prefiere representar a los de siempre, a los ricos. El caso de los compás de Sintrapeten así como otros casos denunciados desde este periódico es paradigmático de que esta socialdemocracia representa a los malditos burgueses de siempre.
Es necesaria la solidaridad de clase de todos los trabajadores con los compás de la Distribuidora Peten, también de los demás trabajadores de la empresa que debe tener en cuenta que la luchas de Sitrapeten es la lucha de todos y no caer en el juego de compra de voluntades que la patronal realiza; es necesario dar un salto de conciencia de clase para hacer defender los intereses de los trabajadores, se necesitan sindicatos combativos como Sintrapeten y junto a los sectores mas avanzados de todas las clases oprimidas construir el instrumento revolucionario que nos haga superar este situación de miseria y explotación que vivimos.