Por Sebastián Ernesto González
En la huelga recién pasada la base del magisterio sufrió la arremetida del gobierno continuador del golpe de estado; hubo maestros toleteados, gaseados, detenidos y enjuiciados; el 27 de septiembre se lanzaron más de 100 bombas lacrimógenas dentro de la Universidad Pedagógica Nacional para desalojar a los maestros(as) allí concentrados. Eso por parte del gobierno, mientras de lado de la administración educativa se hizo deducciones de salario y se levantaron actas de abandono en los centros educativos que permanecían apoyando la huelga.
El eje principal de la huelga del magisterio en el mes de agosto –entre otros- era la situación crítica en que se encuentra el Instituto Nacional de Previsión del Magisterio (INPREMA), en vista a solucionarlo, se logró firmar un acuerdo entre el magisterio y la comisión negociadora representante del gobierno.
En este acuerdo se consensuaron algunas medidas para sanear al INPREMA: aplicar una auditoría externa, crear un manual de puestos y salarios, revisar en el lapsus de un mes los nombramientos de empleados en los últimos 18 meses, además, se llegó a un acuerdo de pago donde el gobierno salió muy beneficiado ya que pagará con muy bajos intereses su deuda con la institución surgida del saqueo a que ha sido sometida, principalmente durante la dictadura de Micheletti.
Dirigencia burocrática del magisterio hace las del gato
El Sindicato de Trabajadores del INPREMA exigió en el mes de septiembre que se le cumpliera con el contrato colectivo firmado en el 2009 durante el gobierno de facto. Es así como a mediados de septiembre los representantes del gobierno y de los 5 colegios magisteriales exceptuando el COPEMH, firman un aumento selectivo a empleados del INPREMA. La posición del COPEMH es no aprobar ningún aumento mientras no se cumplan los puntos acordados en el acta, dejando bien claro que no se oponen a un aumento para los empleados con bajos salarios.
Inmediatamente se da una ruptura a la -hasta ahora- aparente unidad magisterial. El presidente del COLPROSUMAH Edwin Oliva y el del COPRUMH Edgardo Casaña cierran filas en contra de las exigencias del COPEMH, el argumento mediático de Oliva y Casaña es que los trabajadores no podemos estar en contra de un aumento a otros trabajadores y ratifican el aumento al SITRAINPREMA (que no abarca a los que devengan el salario mínimo) lastimosamente, Jaime Rodríguez presidente del COPEMH cometió la ingenuidad de firmar un acta donde se opone al aumento, cuya moción fue presentada por el representante de la Secretaría de Finanzas ante el INPREMA, argumentando que el FMI sugirió no dar ningún aumento por que se pondría en riesgo el acuerdo que se negocia con el gobierno.
Las dirigencias se agarran de las greñas y el gobierno se revienta de la risa
Los últimos programas radiales del COPEMH, COPRUMH y COLPROSUMAH, han servido para que las burocracias gremiales exterioricen sus diferencias de intereses y lleguen al colmo de tildar el conflicto con el Inprema como rivalidades personales por envidia o por ver quién figura más.
Lo cierto en todo esto es que el más beneficiado a sido el gobierno de facto de Porfirio Lobo, mientras los flamantes dirigentes magisteriales utilizan los programas radiales, pagados con las cotizaciones del magisterio, para despotricar y lanzarse improperios y señalamientos personales, mientras el gobierno incumple el acta y siguen más de 3,000 profesores sin recibir su salario desde febrero.
Así no hay atisbo alguno de que regresen a los fondos del Inprema las deducciones hechas arbitrariamente, por ello, su situación sigue igual o peor que antes, y seguro que los grupos golpistas conformados por los oligarcas, empresarios y burguesía no pierden de vista derogar el Estatuto del Docente, hasta ahora no lo han hecho por el temor que le tienen a más de 60,000 maestros y maestras organizados en conjunto con todas sus familias y dispuestos a defender sus conquistas.
Las bases deben expulsar de las dirigencias a los oportunistas y unificar al magisterio
Los únicos capaces de unificar al magisterio son sus bases, sin embargo, estas deben generar la suficiente conciencia para postularse y expulsar a las dirigencias burocráticas que tanto daño le ha hecho al gremio y al país.
Es obligación de los dirigentes actuales despedir inmediatamente del INPREMA a todos los ex dirigentes, familiares o políticos de turno, el aumento debe ser inmediato para los que ganan el salario mínimo y el resto de empleados debe esperar a que se cree un manual de puestos y salarios donde se pague justamente, sin que nadie ostente más que el salario de un maestro promedio.
¡Huelga general por el aumento general de salarios!