Por Ricardo Velásquez
El régimen Lobo-Hernández tiene bien claro uno de sus principales objetivos; ¡destruir los colegios magisteriales! dando continuación a las políticas neoliberales que Ricardo Maduro (2002-2006) profundizó con la aprobación de la Ley de Reordenamiento Retributivo y en la cual se abolían los Estatutos en detrimento de los trabajadores de la salud y educación principalmente. En estos dos años del nefasto régimen continuador del golpe de Estado se ha mantenido en represión constante al magisterio y por todas las vías posibles; han utilizado la policía, el ejército, la fiscalía, el Poder Judicial, el Tribunal Superior de Cuentas, han creado estructuras de padres y madres de familia activistas del Partido Nacional como frente de choque y tienen a la disposición todos los medios de comunicación para desprestigiar al magisterio.
Chantajes sobre la dirigencia
En este momento siguen presionando a la dirigencia del magisterio para que se acepte una nueva Ley General de Educación y las reformas a la Ley del Inprema, para ello han utilizado al Tribunal Superior de Cuentas y han reparado a los presidentes de los colegios magisteriales por haber aprobado en el mes de agosto del año 2010 la cantidad de 50 millones de lempiras para revalorizar la jubilación de los docentes que ya se retiraron del sistema. Un docente sin título universitario y que se haya jubilado en el año 2004 y que solo trabajaba en una jornada apenas obtenía por jubilación en el 2010 unos 6,500 lempiras, la revalorización del año 2010 le implicaba un aumento de unos 500 lempiras. Este documento fue elevado a la categoría de Decreto Ejecutivo y aprobado en Consejo de Ministros y firmado por el mismo Porfirio Lobo Sosa. Curiosamente el reparo solo se hace a los presidentes de los colegios magisteriales.
Tal jubilación para un docente que laboró 40 años dando clases es denigrante, los jubilados de la docencia en Honduras carecen de seguro social y es a esa edad donde se requiere de mayores gastos médicos, por lo tanto la cantidad de revalorización que se les asignó es insignificante. Pero los reparos que ha venido haciendo el TSC desde el 2010, también incluyen el que se le hace a casi 17,000 docentes por pago a la calificación académica y que laboran en jornada plena o exclusiva.
El régimen Lobo-Hernández reprime, destruye y chantajea al magisterio
La estrategia de Porfirio Lobo y sus asesores en materia educativa ha sido arrinconar al magisterio, lo vienen haciendo desde que iniciaron su gobierno como continuadores del golpe de Estado en el 2010, después de la lucha de agosto del año pasado se firmó un documento el cual fue incumplido totalmente por Lobo-Hernández, dando lugar a que este año en el mes de marzo se diera otra lucha en la cual el magisterio salió derrotado y se intervino el Inprema por una comisión donde la principal integrante es Vilma Morales –ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia y negociadora del dictador Michelletti.
En el mes de julio Porfirio Lobo pretendió que la dirigencia aceptara un acuerdo que incluía 21 puntos donde se entregaba principalmente la educación pública y el régimen económico, este acuerdo fue rechazo casi por unanimidad por la base del magisterio. Al no haber consenso el gobierno ha seguido su plan de represión para obligar a la dirigencia a que acepte y firme un acuerdo nacional que significa entregar la educación pública y las conquistas de los docentes. La base magisterial rechazó en el mes de julio un miserable aumento de 900 lempiras, a pesar de que el magisterio tiene congelado el salario desde el 2010, 2011 y lo mismo se avizora para el 2012, esta bofetada dada por los docentes al gobierno de Porfirio Lobo los ha hecho seguir su plan de perseguimiento, represión y chantaje.
Solo la unidad de la FOMH y la base salvará los colegios magisteriales
Ya se denuncia en los programas del magisterio que la cartera de préstamos del Inprema pasará a la banca privada, este es un elemento más que indica que todo avanza a la privatización de los servicios sociales del magisterio. Este régimen continuador de las políticas neoliberales hará hasta lo imposible por destruir los colegios magisteriales, desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) hemos cuestionado la falta de democratización y el sectarismo de los diferentes colegios magisteriales, así como la falta de una estrategia de lucha, sin embargo en este momento consideramos que la defensa del gremio pasa por la unidad de la base y de la FOMH (Federación de Organizaciones Magisteriales de Honduras), la base debe entender que si no sale a luchar por sus conquistas y por el gremio en este momento pasarán décadas para recuperar lo perdido.
El Frente Nacional de Resistencia Popular(FNRP) debe llamar a la movilización nacional para defender al magisterio, ya silenciaron y secuestraron al Sitraunah y ahora van con los presidentes de los colegios magisteriales, solo la unidad en la lucha nos hará retener lo que aún no se ha perdido.