Por Máximo Luján
La ola represiva del gobierno de Porfirio Lobo Sosa contra todos los trabajadores que reclaman sus conquistas y derechos, ha sido una política constante en la administración del “Humanismo Cristiano”. La lucha que sostienen los empleados de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel), para que se les efectúe la aprobación de los fondos correspondientes al presupuesto del 2013 y la implementación de un plan de rescate que beneficie a la institución que está al borde del colapso, fue motivo para que las fuerzas represivas apalearan y gasearan a todos los miembros del Sindicato de Trabajadores de Telecomunicaciones de Honduras (Sitratelh)
La lucha ha sido ardua y larga de parte de los trabajadores, las medidas de presión en todas las dependencias a nivel nacional, van desde las marchas, asambleas informativas, plantones en los bajos del Congreso Nacional, tomas de instalaciones, bulevares y calles. En esta última semana del mes de junio, los compañeros del Sitratelh se tomaron de manera enérgica por dos días consecutivos, las vías de acceso a una de sus principales oficinas. La acción fue reprendida de manera cobarde por los entes policiales, pero admirada por todos los trabajadores que defienden a diario sus derechos.
Sitatelh también protestó frente al Congreso Nacional, demandando más presupuesto para la institución, pero fueron igualmente reprimidos con gases lacrimógenos y toletazos. Las medidas de lucha se vienen manifestando desde el 2012, como iniciativa de los trabajadores de salvar a la institución de la política gubernamental de trasladar Hondutel a manos de empresas privadas, cuya estrategia neoliberal consiste en llevar a la quiebra a las instituciones estatales y posteriormente privatizar los servicios, al ocurrir esto, vienen las alzas de manera voraz e inmisericorde contra la clase trabajadora y el pueblo en general.
Corrupción y Saqueo
Por años, Hondutel fue una de las empresas con mayor rentabilidad para el Estado de Honduras; hoy en día, la estatal telefónica se encuentra sometida en una profunda crisis financiera y corre el peligro de desaparecer como patrimonio de todos los hondureños. El problema de Hondutel no lo han originado los trabajadores como muchos sostienen, el problema radica en el enorme historial de corrupción por parte de los altos funcionarios que han dirigido la institución y que siempre manejaron a su antojo e hicieron de la institución su empresa personal para enriquecerse. El otro factor es el descuido que ha prevalecido en todas las autoridades que han estado al frente de Hondutel, en emprender un proyecto concreto y visionario, donde existan leyes que le permitan competir a la estatal en igualdad de condiciones con empresas privadas. Los ejemplos de saqueo, compras amañadas, contratación de personal injustificado por favores políticos, evasión de pagos de funcionarios dueños de empresas que utilizan los servicios, son algunos de los tantos actos que mantienen en la quiebra a Hondutel. Todas estas anomalías y actos de corrupción han sido denunciados por todos los trabajadores y sindicatos en todas estas décadas.
Privatización de Hondutel
Los esfuerzos de los trabajadores por mantener en pie a una institución que históricamente ha sido pertenencia del pueblo y que ha servido al mismo Estado, cuando ha demandado de su ayuda para subsanar deudas con otras dependencias, esta vez las autoridades le brindan la espalda. El mensaje es claro, la indiferencia de los poderes del Estado en solventar la problemática, con un congreso que tácticamente dilata un conflicto serio al prorrogar su discusión y no aprobar el presupuesto que por ley le corresponde a la institución, los actos represivos ordenados por el ejecutivo para dañar la integridad de todos los compañeros de Sitratelh, conlleva a pensar que la estatal será llevada al sacrificio con su venta o remate a la empresa privada. El gobierno ha propuesto que Hondutel sea manejada por Alianzas Públicas Privadas (Coalianza)
Ante esta crisis que enfrenta Hondutel, desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) nos solidarizamos con la clase trabajadora y exigimos al gobierno de Porfirio Lobo Sosa que frene todo acto represivo en contra de los compañeros de Sitratelh; a los diputados de nuestro “flamante” Congreso Nacional, que agilice todo proceso que conlleve a la aprobación del presupuesto y el plan de rescate. Además, hacemos el llamado a todos los sectores para unirnos en la defensa de Hondutel y oponernos a todo acto de privatización. Hondutel es empresa del Estado, por lo tanto patrimonio de todos los hondureños. El control de la Estatal telefónica lo deben de manejar los trabajadores sobre la administración; ésta debe supeditarse a los dictados emanados desde asambleas democráticas y así frenar los abusos de corrupción a través de acciones transparentes como hacer público los libros contables y que el manejo de las finanzas sean plenamente discutidas en estas asambleas, al igual que cualquier otro tema que sea de interés para el desarrollo de la institución.