Por Joshua y Claudia Rivera
El Colegio Médico de Honduras (CMH), en febrero del 2016, cuando la doctora Suyapa Figueroa asumió la presidencia, comenzó a librar una lucha contra la privatización de la salud, en defensa del Estatuto del Médico Empleado, contra la Ley Marco del Sistema de Protección Social (LMSPS) que ya estaba en vigor. Además, se discutía en el Congreso Nacional la primera de sus cuatro leyes secundarias: la Ley del Seguro Social.
La LMSPS y el conjunto de leyes complementarias que el gobierno hondureño pretende aprobar, están diseñadas para desentender al Estado de su responsabilidad y acabar con el acceso amplio de la población a los servicios de previsión social y de salud, como un derecho universal, y convertirla en una mercancía a la que pueden acceder solamente los más ricos. Un proyecto regional que ha demostrado atentar contra los derechos laborales y el ejercicio humano de la profesión médica.
En Honduras, la Salud es el único servicio público que no ha sido privatizado a través de una serie de alianzas público privadas que los gobiernos neoliberales impusieron tras el golpe de Estado de 2009.
Frente a las postergaciones del gobierno y la Secretaría de Salud, en septiembre de 2017 el gremio médico convocó y sostuvo Asambleas Informativas y medidas de presión a nivel nacional hasta que logró sentar al gobierno a negociar, y con dignidad obtuvo el pago de reajustes y deuda con el gremio desde el año 2013, y el mayor concurso en la historia del Colegio (450 estructuras de trabajo).
En plena crisis provocada por el fraude electoral para imponer la dictadura de JOH, el CMH ha librado su más reciente batalla: las elecciones internas del CMH. El Movimiento de Transformación Gremial (MTG) disputó el control del gremio a dos contrincantes nacionalistas --Movimiento Ético y Democrático (MED) y Coalición de Médicos en Acción de Honduras (COMAH)--, derrotándolos. El MTG no tomó partido en la crisis, se plegó a las normas de un Tribunal de Elecciones controlado por la oposición, denunció las artimañas cachurecas para captar los votos de médicos desempleados, toleró una campaña mediática sucia y, pese a todas estas condiciones, la doctora Suyapa Figueroa fue reelecta. El MTG ganó con más del 75% los 20 cargos de elección, un hecho sin precedentes en la historia del gremio médico, que extiende dos años más el trabajo honesto que hasta el momento ha evidenciado y detenido el proyecto privatizador de la salud en Honduras.
Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) instamos a las dirigencias sindicales del magisterio y otros gremios a emular el ejemplo del CMH. Las ultimas luchas libradas por el gremio médico de Honduras son un modelo a seguir en otros países como Colombia, Panamá y otros miembros de la Confederación Médica Latino-Iberoamericana y del Caribe (CONFEMEL). El CMH se ha transformado en un marco de referencia para combatir los ataques a los colegios profesionales y las conquistas gremialistas en sus respectivos países. Al mismo tiempo llamamos los y las trabajadoras de todos los países a luchar de forma coordinada por la defensa del derecho a la salud pública.