Por Diego Lynch
Durante la primera quincena del mes de agosto, se reunió la Comisión Negociadora del Salario Mínimo, la cual según nuestra legislación debe reunirse a negociar un aumento salarial dos veces por año (cada seis meses); sin embargo, en esta ocasión dicha reunión no fue para negociar sino para ratificar el acuerdo firmado en febrero, en el cual acordaron un aumento anual del 12 por ciento, lo que equivale a un 6 por ciento cada semestre.
Este acuerdo firmado a inicios de año además de ser violatorio a nuestras leyes es irracional ya que el nivel de vida en nuestro país ha cambiado considerablemente de febrero hasta la fecha. La canasta básica ha registrado un aumento de C$ 664 córdobas en lo que va del año, lo que equivale a un precio de C$ 9,400 córdobas. Según el Banco Central de Nicaragua (BCN), la actividad económica ha crecido en 3.5% respecto al mismo período del año pasado, y la inflación podría cerrar en 7% este año. (La Prensa, viernes 13 de agosto del 2010).
Gobierno avala miseria
Mientras el pueblo nicaragüense padece hambre y con la esperanza de que el aumento salarial fuese justo, el gobierno de Daniel Ortega representado por el Ministerio de Trabajo y los representantes sindicales afines al Frente Sandinista estuvieron de acuerdo con la empresa privada en otorgarles las migajas a sus trabajadores, firmando el aumento del 6 por ciento.
Mientras Daniel Ortega se llena la boca hablando de los derechos de los trabajadores y de su gobierno “socialista y solidario”, este mueve a sus peones para que le sigan el juego a la empresa privada y proteger de esta forma sus negocios e inversiones. El Frente Sandinista ya no es un partido de izquierda, ha dejado de luchar por los trabajadores para convertirse en la creciente burguesía nicaragüense, son dueños de empresas, gasolineras y hoteles, y trata de mantener su periferia y sus bases con un discurso popular y entregándoles migajas para contentarlos.
Jeannette Chávez, Ministra de Trabajo, y José Adán Aguerrí, presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP), se mostraron satisfechos con la firma y convocaron a la comisión negociadora a sentarse a negociar el próximo aumento en Enero del próximo año. Aguerrí llamo a los sindicatos a no crear falsas expectativas a los trabajadores y a no continuar engañándolos, y afirmo que falta mucho para que exista una mejoría en el acceso a la canasta básica; acceso del cual ellos (empresarios) si gozan.
Dinero y Trabajo en manos de unos cuantos
Si bien es cierto, según los datos oficiales del Banco Central la actividad económica del país ha incrementado; pero esto no se ha visto reflejado ya que los salarios de los trabajadores continúan sumergidos en la miseria, y según datos suministrados por el Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE), la tasa de desempleo se ha visto incrementada en un 5.8%, lo que ha llevado a contabilizar a unas 229 mil personas desempleadas (El Nuevo Diario. 2 de Agosto del 2010).
Esto nos refleja que mientras el pueblo sufre hambre y desempleo; los empresarios burgueses, el gobierno de Ortega y sus allegados son quienes manejan la economía del país y el dinero; y los dirigentes sindicales lejos de apoyar a la clase trabajadora se venden a los intereses de los empleadores, traicionando así a la clase obrera.
Por un aumento salarial digno
Es hora de que los trabajadores unamos fuerzas sin distingos de banderas políticas por la misma causa, un salario justo y equiparado al de toda Centroamérica. Es necesario destituir a todos los dirigentes sindicales que lejos de velar por nuestros derechos como asalariados cuidan la bolsa de los empleadores a cambio de puestos y migajas. Exijamos al Ministerio del Trabajo y al Gobierno Central que cumplan la ley y convoquen a la comisión negociadora a discutir un nuevo aumento salarial digno, justo y apegado a las necesidades de los trabajadores. Emplacemos a Daniel Ortega a cumplir con lo prometido en sus discursos, en donde promete trabajos para el pueblo y hambre cero.
POR UN AUMENTO SALARIAL DIGNO YA!!!
TRABAJADORES UNIDOS!!!