Por una preparación unitaria, clasista y antimperialista de los actos del 1 de Mayo
Se acerca la fecha del 1 de Mayo, un día especial para la clase trabajadora. El 1 de Mayo se inicio como un día de lucha mundial por establecer la jornada de 8 horas, después de la masacre en Chicago en el año 1886, se convirtió en una jornada mundial de lucha por los derechos y conquistas laborales y contra el sistema capitalista.
Este próximo 1 de Mayo se celebrará en un contexto de crisis mundial del sistema capitalista que, en su decadencia, somete a las masas trabajadoras a las más depravante miseria, desempleo y explotación.
Las granes conquistas laborales que fueron conseguidas con movilizaciones, luchas, sangre y lagrimas, en el transcurso del siglo XX, como fueron la jornada de 8 horas, el derecho a la seguridad social, solo para mencionar las mas importantes, están siendo abolidas por el sistema capitalista en crisis.
En Estados Unidos, por ejemplo, muchos de nuestros parientes deben trabajar dos jornadas (16 horas) para sostenerse en ese país, y para mandar remesas a sus familias. Los propios obreros norteamericanos deben trabajar mas para pagar sus deudas e hipotecas, mientras los niveles de vida decaen estrepitosamente.
La seguridad social también esta derrumbándose en todos lados, aunque en nuestros países de la nación centroamericana, la crisis es mucho mayor. Las pensiones de jubilación son miserables, no permiten el sustento de los trabajadores ancianos. Y ahora tenemos que el Fondo Monetario Internacional (FMI) solicita el aumento de la edad de jubilación, como si los trabajadores de los países atrasados tenemos la misma esperanza de vida que los trabajadores de los países imperialistas.
Entonces, este 1 de Mayo, las centrales obreras y los sindicatos de Centroamérica, tenemos el desafío de rescatar el significado de esa día, convirtiéndolo en una jornada de lucha por la defensa de las conquistas mas elementales del movimiento obrero.
La primera consigna que debemos levantar es el aumento general de salarios, conforme suba el costo de la vida. Los trabajadores vivimos de nuestros ingresos, si suben los artículos de consumo entonces deben subir automáticamente los salarios, sobre todo si tomamos en cuenta que el alza de los precios del petróleo provocan alzas incontrolables que son pagadas por los trabajadores. Debemos luchar también por la homologación de los salarios en todo Centroamérica.
La segunda gran consigna que debemos levantar es la independencia de los sindicatos y centrales obreras en relación a los partidos patronales y las instituciones del Estado burgués. Una de las características de esta época de decadencia imperialista, es el control que el Estado ejerce sobre los sindicatos, incorporando y subordinando las dirigencias sindicales a la gestión del aparato del Estado.
La tercera gran consigna que debemos levantar es la defensa de la seguridad social, lo que implica luchar por el alza y dolarización de las pensiones, extendiendo la cobertura medica al asegurado y su familia, terminar con la privatización parcial de los servicios de seguridad social. El Estado deben velar por los trabajadores jubilados, garantizando una vejez digna.
La cuarta gran consigna que debemos enarbolar es la democratización de los sindicatos y centrales obreras y campesinas. La burocratización de las organizaciones obreras y populares es un flagelo que permite la sobrevivencia del sistema capitalista. En muchas ocasiones, las dirigencias burocráticas se inclinan a favor del gobierno y traicionan las luchas de los trabajadores.
Existen muchas otras importantes consignas y reivindicaciones, pero solo hemos mencionado a nuestro juicios las más importantes. Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llamamos a organizar marchas conjuntas de todas las centrales obreras y campesinas en cada uno de nuestros países, para comenzar a crear una alternativa de los trabajadores, ante la crisis del sistema capitalista e imperialista.