Por José René Tamariz Corea

La directiva de la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), en acuerdo con el denominado Bloque Unitario Sindical y Social Costarricense (BUSSCO), frente a la política de congelamiento salarial del gobierno de Solís, solamente realizaron una “invitación” a sus afiliaciones para participar en la movilización del día 27 de julio, impulsada por los sindicatos del ICE en defensa de sus salarios y en contra del proyecto de ley de contingencia sindical, que pretende incrementar la participación del sector privado en la generación de electricidad.

La invitación

Esta invitación, tanto del sindicato APSE como del BUSSCO, constituyó una claudicación al gobierno de Solís, que la hacían pensando en que el gobierno otorgara alguna migaja de reajuste salarial para el día martes que concluían las supuestas “negociaciones” del incremento salarial del segundo semestre. Al final, el gobierno de Solís decretó, el fin de semana pasado, el miserable y burlesco reajuste salarial del 0,08% para el sector profesional del sector público, es decir, 80 colones por cada cien mil colones. Nuevamente, frente a esta burla del gobierno en contra de los profesionales de los empleados públicos, la directiva de la APSE y la dirigencia de BUSSCO no hizo nada, más que la desmovilizar a las bases, haciendo el juego al gobierno. Mientras, por otro lado, el sector neoliberal, impulsa una salvaje campaña en contra de los salarios del sector público, exigiéndole al gobierno la eliminación de las anualidades, dedicación exclusiva y otros componentes salariales.

En esta situación peligrosa para el conjunto del movimiento sindical del sector público, se necesita la más amplia unidad de acción de todas las fuerzas sindicales, Patria Justa, BUSSCO y las demás organizaciones sindicales, alrededor, tanto de la defensa de los salarios del sector público como la lucha por un reajuste salarial por encima del índice de inflación, la defensa de las convenciones colectivas y en contra de los proyectos que pretenden eliminar los pluses salariales e imponer el salario único. Estas cúpulas sindicales deben deponer sus intereses mezquinos y sectoriales, unificando la lucha, por un pliego petitorio unificado que recoja todas las reivindicaciones y problemática sectoriales. Enfrentar, mediante la movilización y la huelga, la arremetida neoliberal en contra de los trabajadores.

Aceptación pasiva

La directiva del sindicato de APSE, encabezada por Ana Doris González, en el marco de la Asamblea de Presidentes de Bases del sindicato APSE realizada el día viernes 31 de julio, asumió y votó una posición de total claudicación hacia el gobierno de Solís, en cuanto a la nefasta política de congelación salarial en el sector público, al oponerse a realizar una movilización para el día martes 4 de julio en contra del 0% u 0,08% de reajuste salarial del gobierno de Solís.

¿Qué acciones ha desarrollado la directiva de la APSE contra de la congelación salarial? Ninguna. Solamente sacó un pronunciamiento en contra del 0% del reajuste. La directiva de la APSE no ha convocado a ninguna movilización para oponerse a esa política en contra de los trabajadores del sector público, más bien se opone a cualquier movilización, lo cual refleja y demuestra que, de forma tácita, tiene un acuerdo con el gobierno de Solís para desmovilizar a las bases apsinas.

Esta política desmovilizadora y claudicante de la directiva de la APSE crea un precedente histórico peligroso, que puede conducir a la derrota de futuras luchas. Llamamos a todas las bases apsinas a pronunciarse y exigirle a la directiva de APSE que impulse la lucha en contra de la política de congelación salarial y las demás políticas anti-populares de la derecha neoliberal y del gobierno.

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