Por Alberto Castro
Bases Magisteriales y sindicatos de empleados públicos agrupados en la Coordinadora Sindical Salvadoreña (CSS) marcharon el día jueves 10 de marzo, protestando contra la propuesta del gobierno del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de crear un “sistema mixto” de pensiones. La marcha salió a las 9:30 am de Catedral metropolitana, en San Salvador, hacia la Asamblea Legislativa, para presentar su propia propuesta de reforma de pensiones. Alrededor de dos mil trabajadores asistieron a la marcha, a pesar del boicot y las presiones ejercidas por el gobierno del FMLN. Fue una marcha combativa y significativa del malestar entre los trabajadores.
Los oportunistas de ARENA y PDC
La CSS ha rechazado rotundamente la propuesta de sistema mixto presentado por el gobierno del FMLN.
La marcha culminó frente al portón de entrada de la Asamblea Legislativa, edificio que estaba acordonado por la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO) de la Policía Nacional Civil (PNC), la que impidió que los sindicalistas llevaran al pleno legislativo la propuesta previamente elaborada. Esta marcha fue una medida de presión a la Asamblea Legislativa, la propuesta de la CSS fue finalmente presentada sin recibir por parte de los diputados compromiso alguno sobre su posible aprobación.
Pero el mitin de protesta continuó en las calles aledañas a la Asamblea Legislativa, al cabo de un lapso de tiempo en el que los dirigentes agitaban a sus bases y coreaban consignas amenazando con una huelga, diputados del partido ARENA salieron a recibir la protesta con un discurso que refleja la doble moral. Por un lado, dijeron que ARENA apoyaría y defendería la propuesta de los trabajadores, porque no apoyan la propuesta del GOES. Reiteraron que la propuesta de la CSS era justa y que se encargarían de llevarla al pleno legislativo, y fue de esta manera como la comisión de la CSS pudo entrar y llevar el documento al pleno legislativo.
Rodolfo Parquer, diputado del Partido Demócrata Cristiano (PDC), salió a saludar a los trabajadores que aun estaban en las afueras del edificio de la Asamblea Legislativa con un meloso discurso populista muy parecido al de los diputados ARENA, esta vez argumentando que en la Asamblea Legislativa existía una tercera opción, y que el PDC defendía el sistema de ahorros de pensiones, etc.
Lo anterior muestra cómo, sin vacilación alguna, los partidos de la derecha (ARENA y PDC), que siempre han aprobado leyes contra los trabajadores, aprovechan las circunstancias para tomar fuerza. Ocurrió algo inaudito: los diputados de ARENA y PDCV se sirvieron de la permisividad de los dirigentes que cedieron el sonido y dejaron que estos diputados se dirigieran hacia los trabajadores.
La marcha de los trabajadores fue organizada para presentar una propuesta, no para que los diputados de la derecha tomaran la palabra. Los discursos de los diputados de ARENA y PDC son palabras que se las lleva el viento. Ambos partidos históricamente han tenido una política contraria a los intereses de los trabajadores, aprovechando el vacío en la izquierda que ha dejado el FMLN desde que comenzó su giro paulatino hacia la derecha, y que se ha profundizado desde que llego al gobierno en el año 2009. Estos demagogos de ARENA y PDC manipulan las demandas de los trabajadores para ganar espacio contra el ya desgastado FMLN, en su afán de recuperar el gobierno.
Debemos analizar la propuesta de la CSS
La marcha obrera fue un éxito, reuniendo a más de 2,000 personas. La presentación del proyecto de pensiones de la CSS ante los diputados de la derecha, es la misma que se presentó al público, el pasado 27 de febrero de 2016. Este planteamiento debe ser analizado cuidadosamente, tomando en cuenta que es una propuesta alternativa ante la presentada por el gobierno.
La CSS plantea una reforma estructural del sistema de pensiones a partir de la creación de un ente autónomo denominada Instituto Autónomo de Previsión Social (IAPS) bajo la administración de los sindicatos, donde supuestamente aportarían la patronal y los trabajadores un 13% (6,5% por cada sector) y el Estado haría un aporte de 400 millones. Esto puede resultar atractivo a muchos sindicatos, pero en el fondo la propuesta de la CSS lo único que pretende es crear una nueva empresa de administración de ahorro de pensiones, una AFP pero administrada por los sindicatos. No rompe con el sistema de privatización de las pensiones. Este IAPS, de crearse, sería una especia de AFP más, con la diferencia de la administración de los sindicatos. ¿Cual seria la diferencia entre el actual Instituto Salvadoreño de Seguridad Social (ISSS) y el IAPS? ¿ En todo caso, no es mejor fortalecer y mejorar lo existente, sobre todo por la atencion medica y hospitalaria? Estas interrogantes deben ser aclaradas, para beneficio de todos los trabajadores.
La privatización del sistema de pensiones le quitó la responsabilidad al Estado. Lo correcto es que el Estado vuelva asumir el rol de proteger a los trabajadores y los pobres, y sea el Estado quien vele y garantice una jubilación digna. Con la privatización de las pensiones se separó la jubilación de la atención médica y hospitalarias, se debilitó al Instituto Salvadoreño de Seguridad Social (ISSS).
La solución verdadera el colapso del sistema de pensiones privatizado es volver al punto de partida: se requiere ponerle fin a la privatización del sistema de pensiones, y derogar al Sistema de Ahorro de Pensiones (SAP) y fortalecer el funcionamiento del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), reformando esta ley, introduciendo la administración y el control obrero, y adecuándola a las necesidades de los trabajadores. Lo primero es que el Estado vuelva a asumir su rol, y vuelva a aportar, no como un empleador más, sino como Estado, al sistema de pensiones.
Luchar y abrir el debate
Los socialistas centroamericanos llamamos a los compañeros de la CSS y demás centrales obreras y campesinas, a continuar la lucha contra el sistema mixto propuesto por el FMLN, ya que mantiene la privatización de las pensiones, y a abrir un debate serio sobre la necesidad de volver al punto de partida, antes de la privatización de 1996. Todos los sindicatos de trabajadores públicos y privados debemos unificar esfuerzos, y defender la seguridad social por la que históricamente se han librado luchas aguerridas.