Por Armando Tezucún
Los días 3 y 4 de noviembre tuvieron lugar en Guatemala importantes manifestaciones y concentraciones, en protesta contra los intentos de los grupos de poder corruptos de burlar la voluntad popular expresada en el proceso electoral 2023.
La realización de estas movilizaciones es parte de la nueva táctica de lucha decidida por las autoridades indígenas ancestrales, luego de los acuerdos a que llegaron con el presidente electo Bernardo Arévalo y organizaciones de la burguesía. Se decidió suspender los bloqueos de carreteras y vías de comunicación que se llevaron a cabo durante casi tres semanas, que tuvieron un gran impacto en el país. Solo la Alcaldía Indígena de Sololá decidió continuar con bloqueos en ese departamento a partir del 24 de octubre, aunque fueron levantados el 27 a solicitud de la comunidad, pues los pequeños comercios de que se sostiene gran parte de la población indígena de la localidad estaban al borde del colapso.
Las autoridades indígenas convocaron a sus comunidades a acudir a la capital para participar en marchas masivas para protestar contra las maniobras del MP y exigir la renuncia de la fiscal general Porras, el fiscal Curruchiche y el juez Orellana. A las marchas se unieron estudiantes universitarios, organizaciones de la sociedad civil, organizaciones barriales y ciudadanos en general. El viernes 3 los manifestantes se concentraron en cuatro puntos, El Guarda, la Calzada Aguilar Batres, El Anillo Periférico y la ruta al Atlántico, marchando, una parte hacia la Plaza de la Constitución, y otra parte hacia la sede del MP. Ese día los líderes de los 48 Cantones de Totonicapán presentaron un amparo ante la Corte de Constitucionalidad, solicitando a los magistrados que resuelvan un recurso que los dirigentes presentaron el 18 de septiembre, en el que señalan al Ministerio Público de rompimiento constitucional al haber secuestrado actas electorales durante un allanamiento al Tribunal Supremo Electoral.
El sábado 4 se realizaron dos grandes concentraciones, una en la Plaza Central y otra frente a la sede del MP. En la Plaza, Arévalo subió a la tarima donde pronunció un discurso. Los líderes indígenas aprovecharon para hacerle tres peticiones: la creación de un ministerio de los pueblos indígenas, practicar auditorías a los 14 ministerios y hacer una reevaluación de las obras públicas.
Los bloqueos de carreteras y vías de comunicación iniciados el 2 de octubre tuvieron un significativo impacto en todo el país; si se decidió reemplazarlos por manifestaciones, éstas, para tener la misma eficacia, deberían tener continuidad, no dejar pasar una semana o dos entre cada convocatoria, de lo contrario, corremos el riesgo de que se de un fatal retroceso en impulso de las luchas, perdiendo fuerza el movimiento en su conjunto.