Por Frandav Lifú
La Junta Nominadora Proponente ya envió la lista de los 5 posibles candidatos a convertirse en Fiscal General de la República, el listado está conformado por; Jenny Almendárez Flores (95.55%), Mario Alexis Morazán Aguilera (87.98%), Marcio Cabañas Cadillo, Johel Antonio Zelaya Álvarez (84.36%) y Pablo Emilio Reyes Theodore (75.26%).
Ahora, corresponde al Congreso Nacional elegir al Fiscal General y al Fiscal Adjunto, sin duda alguna que, será un fin de mes muy interesante dado el nivel de confrontación que existe en este poder del Estado.
Elección del Fiscal siempre ha sido política
Negar que la elección, tanto de la Corte Suprema de Justicia como del Fiscal General es política, es ser miope e hipócrita, ya que, la historia de nuestro país nos recuerda que siempre se ha hecho la elección bajo acuerdo político de liberales y cachurecos. En el 2009, siendo el presidente de la República Manuel Zelaya Rosales, el Partido Liberal y el Partido Nacional eligieron como Fiscal General y Adjunto a Luis Alberto Rubí (Liberal) y Roy Urtecho (Nacionalista), ambos personajes con amplia trayectoria política en sus respectivos partidos.
Luis Alberto Rubí y Roy Urtecho fueron obligados por el Congreso Nacional (dirigido por Juan Orlando Hernández) a dimitir en junio del 2013, de no haber dimitido estaban amenazados a pasar por un Juicio Político, las acusaciones que les hicieron fue incompetencia y despilfarro de dinero. Una vez hecha efectiva la renuncia, nunca fueron enjuiciados.
En ese momento, el primer Fiscal de la República, Ángel Edmundo Orellana, manifestó “La intromisión del presidente del Congreso Nacional para nombrar fiscales de acuerdo con sus intereses y los pactos hechos por fiscales especiales con criminales hacen que el Ministerio Público vaya “en caída libre”, es lamentable que el Ministerio Público obedezca los designios emanados del presidente del Congreso Nacional. “A partir de este momento, se retorcieron la naturaleza y las funciones del Ministerio Público y esto ocurrió hace mucho tiempo. La institución va en caída libre porque ya pasó el borde del precipicio y ahora está en el abismo”.
Fue del parecer que el próximo nombramiento del Fiscal General atenderá el interés del partido político y bajo las condicionamientos de orden partidista. La institución continuará el proceso de degradación debido a la influencia que tiene el Congreso Nacional, de donde surge toda la “pudrición de este país”. LP (27/06/2013)
Se elige y se reelige al Fiscal peón de JOH
En octubre del 2012, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia declaró por mayoría como “inconstitucional” la creación de las ZEDE, un proyecto personal del Presidente de la República Porfirio Lobo y del Presidente del Congreso Nacional, Juan Orlando Hernández. El único voto en contra fue el de Oscar Fernando Chinchilla.
El 12 de diciembre de 2012 el Congreso Nacional aprobó la destitución de los cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, de los 5 que la integraban, 4 fueron separados, siendo ellos; José Antonio Gutiérrez Navas, Gustavo Enrique Bustillo Palma, José Francisco Ruiz Gaekel y Rosalinda Cruz Sequeira. El único que no fue separado fue Oscar Chinchilla.
Como premio por su lealtad a Juan Orlando Hernández, Oscar Chinchilla fue electo Fiscal General el 1 de septiembre de 2013, obteniendo el apoyo de liberales, nacionalistas, UD y PDCH.
En junio de 2018, sin estar en la lista de los 5 propuestos por la Junta Nominadora, Oscar Fernando Chinchilla fue reelecto como Fiscal General. Por supuesto, lo hecho por Chinchilla fue eliminar toda la competencia de la familia Hernández en la actividad del narcotráfico y, cerrar los ojos ante los ignominiosos casos de corrupción que realizaron en la administración del Estado.
¿Qué se avizora en esta elección?
A ninguno de los 5 propuestos se le conoce militancia partidaria, lo que vuelve interesante la elección del nuevo Fiscal General y el Adjunto, el Partido LIBRE ha manifestado que respetarán la propuesta de los 5 candidatos de la Junta Nominadora. El Partido Nacional, ha dado muestras en las últimas semanas de boicotear cualquier propuesta del Partido en el gobierno. El Partido Liberal sigue cavando su tumba entre más cercano se mantiene a los intereses del PN, sin embargo, son especialistas para cambiar de rumbo, de ahí que pueden ubicarse en cualquier lado. Aun así, el partido en el gobierno requiere del voto de al menos, 2 diputados nacionalistas, quienes hasta ahora, no dan muestras de fraccionarse.
El pueblo debe salir a movilizarse para exigir que el Fiscal General del Estado sea electo por votación directa, ha quedado demostrado que tanto la Junta Nominadora como en el Congreso Nacional, se actúa de acuerdo a los intereses del poder, del dinero, del crimen y de la corrupción.
El Fiscal General no puede seguir siendo electo en contra de los intereses del pueblo.