Por Armando Tezucún
Para el nuevo binomio presidencial, Bernardo Arévalo y Karin Herrera, fue crucial el respaldo de los imperialismos estadounidense y de la Unión Europea, para resistir los continuos ataques de las mafias contra los resultados electorales y finalmente tomar posesión de sus cargos el 14 de enero. La administración Biden fue clave en la negociación entre Arévalo, sectores del empresariado y la dirigencia de las comunidades indígenas, que dio como resultado la suspensión de los bloqueos de calles y carreteras en octubre pasado, que fue la forma de lucha que encontraron los sectores populares para manifestar su rechazo a las mafias y defender el voto popular; estos bloqueos tuvieron en vilo y casi paralizaron el país durante un mes.
Una vez en el ejercicio del poder, el gobierno de Arévalo está dando los pasos para alinearse obedientemente y fortalecer los lazos con los poderes imperialistas, que le están dando pleno respaldo.
El 5 de febrero se realizó en Antigua Guatemala la 37 reunión anual de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de Centroamérica y República Dominicana. Durante el encuentro, el presidente de la entidad financiera, Ilan Godfajn, reiteró el compromiso del BID de trabajar estrechamente con el gobierno de Arévalo para aprovechar las ventajas que ofrece Guatemala para la inversión. El presidente guatemalteco anunció que busca el apoyo financiero del BID para impulsar proyectos de infraestructura. Unos días más tarde, el representante del BID en Guatemala anunció el compromiso de la entidad para apoyar los proyectos a cargo de la primera dama, Lucrecia Peinado, en las secretarías que dirige.
En otro ámbito, en el primer mes del nuevo gobierno se reactivó la cooperación entre Estados Unidos y el Ministerio de Gobernación, en cuanto a la capacitación de agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) en temas de investigación criminal, de parte de varias agencias de seguridad estadounidenses, y en cuanto al flujo de información entre ambos países. Para esto fue crucial la realización de reuniones entre el secretario de Seguridad Nacional de la administración Biden, Alejandro Mayorkas, y el ministro de gobernación guatemalteco Francisco Jiménez; Mayorkas manifestó su apoyo al gobierno de Guatemala en temas de seguridad y combate a la delincuencia.
Por otro lado, el nuevo embajador de Estados Unidos en Guatemala, Tobin Bradley, y el subsecretario Adjunto para Centroamérica del Departamento de Estado, Eric Jacobstein, sostuvieron reuniones con el ministro de relaciones exteriores de Arévalo, Carlos Martínez, sobre el candente tema de la migración irregular, un tópico sobre cuyos lineamientos la administración Biden requiere el total acuerdo de las autoridades guatemaltecas.
El 14 de febrero se llevó a cabo el foro Diálogo Económico de Alto Nivel, organizado por Atlantic Council y la organización de la burguesía guatemalteca FUNDESA. Estuvieron presentes el embajador Bradley y el presidente Arévalo, además de otros funcionarios gringos, miembros del nuevo gobierno y representantes empresariales. La tónica del evento fue aprovechar la mejora de las relaciones entre Estados Unidos y Guatemala para que los sectores privado y público trabajen juntos para incentivar la inversión local y extranjera, atraer más inversión y generar nuevos mercados. En otras palabras, Arévalo y su gobierno están abriendo las puertas y entregando el país en bandeja al capital extranjero, junto con la burguesía local, que espera ansiosamente ganar su tajada de los futuros negocios. Y este festín empresarial Arévalo y sus aliados lo justifican con la cháchara de siempre de creación de empleo, prosperidad económica, crecimiento económico sostenido, etc.
Para estrechar los lazos y reforzar su alineamiento con el imperialismo europeo, el presidente Arévalo realizó una gira por varios países de la región, iniciando el 16 de febrero en la Conferencia de Seguridad en Munich, y finalizando el día 23 en España. En las diferentes reuniones y eventos a que asistió se trató de diversos temas, reuniéndose también con empresarios, en especial en España, donde ofreció las mismas oportunidades de inversión y negocios. Cabe destacar que Arévalo se reunió durante su viaje, con el presidente ucraniano Zelensky, y con el presidente de Israel Isaac Herzog, a quienes manifestó su solidaridad, alineándose con la postura de los imperialismos gringo y europeo en torno a los conflictos bélicos en Ucrania y Palestina.
Los planes de inversión de la burguesía, adoptados por el nuevo gobierno, tienen como pilares el ataque a los salarios, con temas como los salarios a tiempo parcial, los salarios diferenciados y por circunscripciones económicas. Llamamos al pueblo trabajador y sus organizaciones a estar alertas ante las alianzas entre el gobierno y los empresarios, y a estar listos a defender los derechos laborales frente a esta coalición.