Por Horacio Villegas
Luego de las protestas que los estudiantes universitarios llevaran a cabo en contra al aumento a la tarifa del transporte, los estudiantes de educación media emprendieron, y hasta el momento siguen, en jornadas de protestas en las afueras de sus instituciones. Tanto los colegios técnicos, y entre otros colegios públicos en Tegucigalpa, como en San Pedro Sula, continúan luchando a la espera de sus peticiones.
Estas peticiones además de centrarse en bajar los impuestos a los combustibles, también incluye las mejoras de sus instalaciones educativas, una boleta estudiantil que equivale a un pase gratuito en el transporte, y un bono estudiantil mensual que reemplace al que se entrega anualmente. Los reclamos de los estudiantes responden a las precarias condiciones en las que se encuentran la mayoría de colegios públicos del país.
Los focos de protesta de los estudiantes de media
En San Pedro Sula se intensificó la jornada de los jóvenes estudiantes de colegios públicos, como el caso de los compañeros del Instituto José Trinidad Reyes, quienes el 10 agosto llevaron a cabo una movilización con rumbo al parque central de esta ciudad, con el fin de reclamar un bono estudiantil. Otros colegios se unieron a esta exigencia de los compañeros de educación media, como el Centro Técnico Hondureño Alemán, entre otros.
Mientras que, en Tegucigalpa, el Instituto Tecnológico de Administración de Empresas (INTAE), sostuvieron una protesta el jueves 2 de agosto, enmarcados en la exigencia de suprimir el aumento a la tarifa del transporte. Ya que dicho aumento estaría atentando contra el poco presupuesto familiar que los estudiantes tienen a la hora de llegar a sus aulas de clase.
Tanto las jornadas de protesta de los estudiantes de media, que han estallado en San Pedro Sula, como las que continúan en Tegucigalpa, fueron aplacadas por las fuerzas represivas, quienes lanzaron indiscriminadamente bombas lacrimógenas a los compañeros combativos de colegios públicos.
El martes 21 de agosto la Secretaría de Educación anunció una serie de medidas arbitrarias y represivas para los compañeros que lideran las protestas contra el aumento de la tarifa de transporte, tales como sanciones civiles y penales. Las sanciones se extienden hasta los maestros de los compañeros, quienes son los llamados, según la Secretaria de Educación, a ser los verdugos que denunciarían a los estudiantes en protesta.
“…se ordena a los directores departamentales, municipales y distritales aplicar sanciones a los docentes. Una medida que se tomará porque se niegan a sancionar estudiantes que lideran las tomas y protestas” (El Tiempo Digital, 21 de agosto de 2018).
Unifiquemos luchas a favor de la eliminación del aumento al transporte
Juan Orlando anunció una reforma educativa el pasado 2 de agosto en San Pedro Sula, reforma planteada en medio de la represión a los compañeros que luchaban por las mejoras en sus instituciones; esto confirma las maniobras del dictador para ir apaciguando las luchas dispersas de los distintos sectores.
La dinámica de la lucha de los estudiantes de media, y la ausencia de los otros sectores sociales en apoyo a los compañeros, demuestra la victoria asestada por el gobierno al negociar con el sector transporte. Mientras no se unifiquen las luchas contra esta medida, que ya lleva un mes de haberse instalado a expensas de la lucha del sector transporte, no podrán arrancársele otras reformas urgentes a este gobierno.